¿Cómo iniciar un negocio con un amigo?

Si está pensando en emprender un negocio con un amigo, respire, analice la situación y antes de tomar la decisión tenga en cuenta estos consejos.
 
¿Cómo iniciar un negocio con un amigo?
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POR: 
Cristina Lucía Valdez Lezaca

El artículo ¿Cómo iniciar un negocio con un amigo? fue publicado originalmente en Revista Diners de septiembre de 2016

Augusto Pérez es un publicista y diseñador de cuarenta años que ejerció durante la mayor parte de su vida como profesional independiente. Hace diez años fue invitado a participar en una convocatoria de una firma productora de bebidas para elaborar una publicación periódica, pero debía presentarse como persona jurídica, es decir, con una compañía formal. Fue entonces cuando decidió crear empresa al lado de su amigo Adrián Hernández, consultor en comunicaciones.

negocio con un amigo


Ha pasado una década y hoy la empresa de comunicaciones estratégicas que surgió en una oficina subarrendada y sin ningún empleado tiene quince trabajadores de planta y un equipo satélite que funciona por proyectos. Y pasaron la prueba del tiempo, pues de acuerdo con registros de la Cámara de Comercio de Bogotá (CCB), las empresas que no han cumplido los tres años de funcionamiento son las que tienen mayor riesgo de liquidarse; las que cumplieron más de ocho años de creadas son más estables, y las que superan esta edad alcanzan un mayor grado de consolidación en el mercado.

“No ha sido fácil, pero hemos logrado mantenernos durante una década”, cuenta Pérez. ¿Y siguen siendo amigos? “Lo clave es respetar la intimidad de cada socio, ya que muchas veces la relación comercial no termina en la oficina, se expande al ámbito personal y hay que ser muy respetuosos y cautelosos para no tener problemas y mezclar ambos mundos”, dice Hernández, quien ha creado otras empresas con amigos.

El secreto de iniciar un negocio con un amigo

 

El consultor recomienda tener en cuenta dos aspectos al momento de amalgamar sociedad con amistad; el primero consiste en que el amigo tenga capacidades y conocimientos en el campo en el que se desempeñará la empresa que se va a emprender, “es decir, que su profesionalismo sea un aporte –puede ser financiero o administrativo–” y el segundo, en que la persona tenga valores sólidos, que sirvan de criterio y base en los tiempos de crisis, para soportar las tempestades del emprendimiento. Y esto tiene mucha relación con la honestidad, ya que si hay confianza, la empresa podrá seguir su camino sin contratiempos.

En esto coincide el director del programa de Administración de Empresas de la Universidad de La Sabana, Pablo Moreno Alemay, quien opina que la amistad debe verse como una ventaja, “pues ya se ha creado un lazo de confianza, que es fundamental para conseguir y mantener a un socio; pero justamente, por eso se deben definir las reglas desde la creación del negocio”.

Moreno Alemay recalca que la amistad no justifica que las tareas no se cumplan en los plazos pactados, que no se paguen las obligaciones financieras que se adquieren entre socios, o que no se desempeñen a cabalidad las funciones de cada uno.

“Encontrar el socio ideal es una de las tareas más complicadas de un emprendedor. El conocimiento de la personalidad de un amigo y la confianza que se tiene en esa persona pueden ser una gran fortaleza para iniciar un negocio conjunto, pero justamente los mismos factores pueden producir graves consecuencias. Deben separarse y diferenciarse desde el principio ambos roles: el de ser amigos y el de ser socios”, puntualiza.

¿Afinidad o complementariedad?

 

El año pasado se crearon 257.835 empresas en Colombia, de acuerdo con Confecámaras, de las cuales 63.029 fueron sociedades y 194.806 personas naturales. Esto significa que los emprendimientos llevados a cabo motu proprio triplican a los que se realizan en equipo, aunque perecen más rápido.

“La mayoría de las empresas que se liquidan son microempresas, creadas como personas naturales con pequeños capitales, que en muchos casos conocen el negocio o la actividad en la cual incursionan, pero que no cuentan con el conocimiento para gestionar la empresa, lo que se convierte en factor determinante de liquidación”, afirma el informe Causas de la liquidación de empresas en Bogotá, efectuado por la Cámara de Comercio de Bogotá.

Por lo general, cuando decidimos iniciar un proyecto empresarial pensamos en otras personas que quieran acompañarnos. “Hay quienes buscan socios capitalistas para financiar su proyecto; hay otros que necesitan socios trabajadores que aporten su experiencia y know how, y hay quienes simplemente buscan acompañantes para no emprender solos”, indica el consultor español Sergio Suárez Rosa.

¿Dónde buscar socios para montar un negocio?

 

El consejero afirma que la mayoría de los emprendedores que incorporan socios a sus proyectos de negocio buscan primero entre sus amistades y familiares. “El criterio de selección pasa más por afinidad personal que por perfil profesional o complementariedad”, dice. Y esto, a la postre, resulta erróneo, pues lo ideal es buscar equipos multidisciplinarios.

Noam Wasserman, investigador del Harvard Business School, plantea en su libro Los dilemas del fundador: anticipándose y evitando las dificultades que pueden hundir un emprendimiento, que 40 % de los emprendimientos que se realizan en Estados Unidos incluyen entre los miembros fundadores a amigos y ha encontrado puntos a favor y en contra de esta situación.

Por un lado, el consultor asegura que cada vez que se incorpora un amigo a un negocio, las posibilidades de fracaso se incrementan en un 29 % por amigo.

Un buen amigo, pero ¿Sin bases de negocio?

 

¿Las causas? Wasserman asegura en su libro que los amigos tienden a minimizar y obviar los problemas del negocio para preservar la relación de amistad. El estudio de la CCB ratifica que, en efecto y para el caso colombiano, uno de los motivos por los que las empresas perecen en corto tiempo, es porque fueron creadas por amigos y sin bases sólidas.

Pero, de igual forma, Wasserman reconoce que se ha comprobado que los equipos emprendedores más estables están integrados por antiguos compañeros de trabajo que son amigos. ¿Por qué? Según explica en su libro, mientras que los amigos y la familia parecen ser siempre la opción natural a la hora de buscar cofundadores y miembros para el equipo, estas relaciones a menudo se convierten en obstáculos a la hora de tomar decisiones duras o hacer ajustes dentro de la compañía.

Por el contrario, los antiguos compañeros de trabajo o nuevos amigos, que tengan habilidades complementarias, son normalmente la mejor opción a la hora de buscar socios, pues prima la visión del negocio y el pragmatismo por encima del lazo de amistad.

El escritor británico especializado en temas financieros y de negocios Lewis Humphries aclara en su columna Razones por las que no se deben hacer negocios con amigos, que “se tiende a creer que una relación existente de amistad se transformará fácilmente en una exitosa unión comercial, lo cual no es muy común”.

Añade que personas con los mismos valores y filosofías pueden no compartir la misma forma de ejecutar varias tareas de negocios, lo que puede crear un conflicto al momento de establecer el modelo de negocios o de fijar y cultivar la cultura corporativa de la empresa.

Criterios para iniciar un negocio con un amigo

 

Tenga en cuenta los siguientes criterios en el momento que decida ponerse la camiseta de emprendedor y poner en marcha, con uno o varios amigos, una idea de negocio, para que resulte exitosa y no pierda la amistad por el camino:

Más que socios

• Sus amigos, que a la postre serán sus socios, deben compartir los mismos valores, así como la visión del proyecto, los objetivos que buscan alcanzar y el grado de esfuerzo y sacrificio que están dispuestos a entregar.

Se complementa con su amigo

• Tener perfiles complementarios. La idea es que nuestros socios nos complementen y que sean fuertes en aquello en lo que nosotros somos vulnerables o no tenemos muchos conocimientos.

Por ejemplo, si nuestro fuerte no son las ventas, lo aconsejable consiste en que nuestro socio tenga ese carisma y visión comercial.

Lo que se denomina en el mundo empresarial como una propuesta atractiva de valor de la que nosotros carecemos.

Ambos están igual de comprometidos

• Compromiso al 1.000 %. El emprendimiento no es un camino sin altibajos y así como hay momentos de efervescencia, también existen los dolorosos, y para ello se requiere un equipo que tenga una capacidad de trabajo similar.

Acuerdo sobre papel

• Antes de dar el sí haga un acuerdo –preferiblemente que quede sobre el papel– en el que se estipulen:

Cargos, funciones, forma de resolución de conflictos, repartición de utilidades y todo lo que tenga que ver con temas financieros.

Háblese con esa persona todo el tiempo

• Comunicación abierta y transparente. Tal y como ocurre en los matrimonios, debe existir una comunicación constante y honesta sobre lo que ocurre en la empresa.

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noviembre
9 / 2020