Tres lugares de gelato italiano para comer en Bogotá
Revista Diners
Es muy diferente hablar de gelato y helado. No se refiere solamente a una diferencia idiomática, sino que dentro de su preparación y su aspecto hay muchas características entre uno y el otro.
El gelato es italiano, se trata de un postre frío y cremoso que suele ser más bajo en azúcar que el helado normal. También tiene menos contenido de grasa y, por sus procedimientos de producción artesanal, no tiene conservantes, por lo que es una opción mucho más saludable a la hora de escoger un postre.
Según Mateo Sangiovanni, dueño de Orso una de las heladerías escogidas para esta selección, “un gelato se hace con una máquina que produce pequeñas cantidades de helado, al que se le agrega máximo un 30 % de aire. En cuanto al dulce, el gelato italiano tiene un 5 % más de azúcar y su característica es que sea espatulable, por eso allá no lo sirven en bolas sino en espátula. En cambio, en Estados Unidos, el concepto es diferente. Allá le bajan al azúcar y le suben a la grasa. Cuando la grasa está a -18 grados se vuelve una piedra, por eso es que allá lo sirven en bolas”.
Bogotá ha venido creciendo en su oferta de lugares para disfrutar de un buen gelato. Algunas de ellas con mucha tradición y otras que se han establecido desde hace poco tiempo. Si busca dónde comer un buen postre, aquí le recomendamos estas opciones.
San Giorgio
El restaurante está por cumplir 24 años y la gelateria va por los 4 años. Pero desde hace mucho tiempo hacen helados que no comercializaban. A principios de los años ochenta, una de las primeras máquinas italianas para hacer helado era propiedad del papá de Mariangela Zito, una de las propietarias de San Giorgio, y en ella hacían gelato con la receta italiana.
Todo ese proceso era artesanal y al día de hoy siguen manteniendo esa tradición. En San Giorgio producen puro gelato artigianale, no tiene conservantes y se va batiendo hasta que alcance su cremosidad.
Tienen 16 sabores para escoger, paletas artesanales y coronas de helado, que son una especie de pastel para ocasiones especiales y que se preparan por encargo. En algunas de las recetas de sus helados solo se usa fruta y agua, por lo que son una buena opción para los veganos.
Michelle
Las heladerías Michelle hacen parte de las más representativas del gelato en Bogotá. Sus neveras están llenas de gelato fresco que se sirve con espátula, como lo hacen tradicionalmente los italianos.
Los helados se hacen a diario en cada punto de venta, para garantizar la frescura, el sabor y la cremosidad de cada uno de sus sabores. Usan frutas frescas e ingredientes de alta calidad en la fabricación de sus productos.
Su carta tiene más de 36 sabores, entre los que destacan el de amarenas, una especie de cereza italiana, y straciatella, que consiste en helado a base de leche y relleno con pedazos de chocolate.
Orso
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Tenemos sabores para todos los gustos. #OrsoHeladeria Foto por: @____soto__
Comenzó hace cuatro años y siempre se pensó como una heladería de barrio que le ofreciera el mejor helado posible para cualquier persona. Sin embargo, Orso está en la mitad, ni es gelato típico italiano, ni es helado americano, es decir, “no somos tan dulces ni tenemos tanta grasa, creamos un helado pensado en los gustos de los colombianos”, dice Mateo Sangiovanni, dueño de Orso.
Orso fabrica 38 sabores a la semana y los favoritos de los clientes son caramel cookie dough, straciatella, yogur con amarena, limonada de coco y hay uno nuevo que se llama chocolate rock.
En Orso también hay carta de cafés, brownies, hamburguesa de helado y pan de waffle.
