El Castillo Marroquín y 4 destinos para celebrar Halloween en Latinoamérica

Si quiere poner a prueba sus nervios, lo invitamos a conocer los destinos donde los fantasmas e historias aterradoras son el principal atractivo. Ideal para celebrar Halloween.
 
El Castillo Marroquín y 4 destinos para celebrar Halloween en Latinoamérica
Foto: @ponchelass/ Unsplash/ Castillo Marroquín/ Humberstone, 2022
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Revista Diners

Las historias de terror en Latinoamérica hacen parte de la memoria colectiva de la humanidad. Sirven para celebrar Halloween, explicar sucesos que la ciencia no puede y causar espanto a quienes se atreven a perturbar a estas almas en pena. Aquellos destinos, como el Castillo Marroquín, se convierten en símbolos de misticismo. Su fama trasciende fronteras y es por eso que llegar turistas desde lo más recóndito de la Tierra.

Algunos están dispuestos a enfrentar cara a cara el peligro sobrenatural, y otros lo hacen solo por diversión. Lo cierto es que los espantos que asustan en estos lugares son de personas que murieron trágicamente acá y en noche de brujas suelen aparecer para mantener su historia viva por otro año más.

Si usted es de estas personas que quiere vivir una experiencia sobrenatural y sentir el ambiente de las películas de terror, Diners le muestra cinco lugares de Latinoamérica en los que puede poner a prueba sus nervios de acero para celebrar Halloween.

1. Castillo Marroquín (Chía, Colombia)

Hacienda Yerbabuena. Foto: Archivo Diners.Caricatura: Keko.

Conocido antiguamente como la Hacienda Yerbabuena, en territorio cundiboyacense, había una casa colonial que le perteneció al millonario José María Marroquín y a su esposa Trinidad Ricaurte, ambos devotos de la fe católica.

Una tarde fría de 1828, cuando la pareja estaba acompañada de su servidumbre para rezar el rosario matutino, la señora Ricaurte pidió permiso para ir por un chal a la habitación matrimonial. Su esposo fue a buscarla, luego de media hora de espera. Se encontró con que la puerta de la habitación estaba cerrada con llave, pero su esposa nunca apareció.

La buscaron durante días, meses y años. Hasta que un día fue hallado, a orillas del río Bogotá, el chal que fue a buscar a la habitación. Desde entonces se dice que la señora Ricaurte recorre lo que alguna vez fue su hacienda, algunos aseguran haber visto a la mujer mirando fijamente el río Bogotá por las noches.

Los nuevos empresarios del lugar, que son dueños desde 2001, contrataron a un sacerdote español, otro maya y a un monje tibetano para apartar las malas energías, sin embargo, quienes visitan el castillo aseguran que a menudo se ven sombras y se sienten presencias extrañas en el lugar.

A pesar de la esta historia, se suelen realizan fiestas, matrimonios y cenas de grado en el lugar. Para más información haga aquí.

2. La isla de la muñecas (Xochimilco, México)

Al sur de la Ciudad de México está Chinampa, uno de los canales fluviales de Xochimilco, sirve para celebrar Halloween pues está adonado por cientos de muñecas que contenienen un poderoso espíritu infantil.

Esta historia empieza con Julián Santana Barrera, un hombre que tenía su casa a las orillas de este canal y quien -por cosas de la vida- encontró una niña muerta, a la que le dio una sepultura cristiana.

Sin embargo, Santana aseguró que el espíritu de la niña lo atormentaba durante el día y la noche, con juegos, risas, gritos y llantos desconsolados. De ahí que el mexicano decidió llenar la isla de muñecas, como una forma de protección o para simplemente distraer a la niña que atormentó su vida hasta su muerte, en 2001.

Hoy, la isla de las muñecas es un lugar turístico que reta a los visitantes a pasar la tarde en el lugar. Aquí podrán entrar a la habitación de Santana donde se encuentra en su cama a una muñeca bautizada como Agustinita, quien fue la primera de la colección.

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El pueblo de Humberstone (Tarapaca, Chile)

Este pueblo, considerado Patrimonio de la Humanidad, es uno de los lugares más aterradores de Latinoamérica. No solo por ser el recuerdo de una opulenta zona minera, sino por los vestigios de la explotación de hombres, mujeres y niños.

Los visitantes pueden recorrer sus calles y ver los ostentosos teatros y hoteles de la zona devorados por la arena y el tiempo. Las leyendas dicen que se puede escuchar a mineros picando rocas y el crujido de sus dientes comprobando cada piedra de sal. Aunque la Unesco quiere restaurar el lugar y adecuar algunos hoteles para futuros visitantes, los chilenos prefieren que se quede así por su emblemática historia.

Casa Matusita (Lima, Perú)

Esta casa, construida sobre las antiguas ruinas de la muralla de Lima, que dividía a los indígenas y españoles, es conocida en el Perú por estar maldita desde sus cimientos. Desde su edificación en 1820 fue usada para interrogar a criminales de la Guerra del Pacífico que enfrentó a Perú y Chile.

Luego le perteneció a un antiguo comerciante japonés, quien encontró a su esposa con otro hombre y los asesinó a sangre fría. Después, fue vendida a un millonario que maltrataba a sus sirvientes, quienes un día envenenaron su comida y la de sus invitados.

Finalmente, el periodista Humberto Vilchez Vera decidió quedarse una semana en la casa para comprobar que no había nada malo en ella. Al terminar su periodo, confesó que escuchó voces durante las noche que lo atormentaron al nivel de sufrir trastornos psicológicos, por lo que se internó voluntariamente en un manicomio.

Hoy la casa sirve, en su primer piso, de banco, mientras que su segunda planta permanece sellada y hasta la fecha nadie se ha atrevido a desentrañar la verdad del lugar. Algunos transeúntes se reúnen para celebrar Halloween a su alrededor hasta la fecha.

El solar de las siete muertes (Bahía, Brasil)

Ubicada en el centro histórico del Salvador, esta mansión de arquitectura portuguesa, española y árabe es una de las más antiguas del país. Algunos historiadores dicen que fue construida en 1720.

Su propietario, un millonario cauchero era conocido por maltratar a sus trabajadores, hasta que un día sus esclavos lo envenenaron junto a su familia. Después del asesinato, el cura Manoel de Almeida se mudó a la casa para exhumar los cuerpos y también terminó asesinado junto con los esclavos en el solar de la casa.

Los vecinos aseguran que se escucha hasta hoy el sonido de los grilletes, gemidos y murmullos. De ahí que la casa se convirtió en un lugar atractivo para los visitantes con nervios de acero.

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octubre
31 / 2022