Los Rolling Ruanas: “por tamal y camiseta caímos en la trampa”

El cuarteto bogotano lanzó el video musical de ‘Por acá no escampa’ que contó con la participación de Juanpis González y Las Áñez. Una crítica a la corrupción electoral.
 
Los Rolling Ruanas: “por tamal y camiseta caímos en la trampa”
Foto: Instagram Los Rolling Ruanas / @losrollingruanas
POR: 
Maria Camila Botero

Hay un momento clave para Los Rolling Ruanas: Rock al Parque 2017. Al ritmo de la carranga, estos cuatro bogotanos vestidos con ruanas amarillas pusieron a poguear a las más de 180.000 personas que disfrutaban de aquel domingo caluroso en la capital colombiana. 

Con su habitual energía y carisma entonaron grandes éxitos como Toxicity de System of a Down y Paint it, Black de los Rolling Stones. Eso sí, reemplazaron la batería por la guacharaca e incluyeron los inconfundibles sonidos del tiple y el requinto. “Para que vean que se puede armar una buena rumba con carranga”, dijo en ese entonces Juan Diego Moreno —vocalista de la agrupación— luego de agradecer a “su majestad el rock por abrirle las puertas a la tradición”. 

Cuatro años después de aquella presentación y de haber vivido tantos momentos felices —como el día en que Kiss publicó en su página web el cover que los colombianos hicieron de la canción I was made for loving you o cuando tuvieron su primera gira por Estados Unidos y Europa afirman sin dudar que ese 2 de julio ha sido el mejor. “Fue un antes y un después. Dividió nuestra historia en dos”.

“Si por allá le llueve, por acá no escampa”

Entre todas las cosas malas, la pandemia les dejó algo muy positivo: dos discos nuevos. Su más reciente producción musical es Nuestra tierra, un álbum en el que converge el amor por el campo, el respeto por los conocimientos ancestrales y la unión. 

Entre esas canciones está Por acá no escampa, un tema compuesto por Juan Diego que cantaron junto al dúo Las Áñez y que en el video musical contó con la participación especial de una figura colombiana que “representa” la corrupción, el abuso de poder y el clasismo: Juanpis González, el personaje interpretado por Alejandro Riaño. 

“Grave la situa’, sumercé, por tamal y camiseta caímos en la trampa”, dice una parte de la canción que, con un tinte irónico, critica la situación política y social de Colombia. “Se avecinan las elecciones, pero más que eso, la letra representa nuestra historia patria. Por eso usamos esta arma tan poderosa que es la música para alzar la voz y decir ‘venga, ya estamos cansados, pensemos bien las cosas’. Si va a recibir el tamal, recíbalo, pero vote a conciencia. La idea es dejar el mensaje de que podemos cambiar las cosas si nos unimos”, comenta el tiplista Jorge Mario Vinasco.

Por su parte, Fernando Cely, quien toca el requinto, expresa que lo más importante para él es que quien suba al poder “entienda que los cargos públicos están al servicio de la gente y no al contrario. Creo que el día que se posicione alguien que trabaje para el pueblo, podemos ver un cambio especial”.

Un lugar en el corazón para el campo

Así como el álbum busca transmitir un mensaje general sobre el cuidado del territorio, Por acá no escampa espera sembrar una semilla de comprensión, tolerancia y amor hacia los demás. 

Es por esto que el guitarrista Luis Guillermo González (Memo) asegura que uno de los principales problemas que tenemos como colombianos es decir que no se puede hablar ni de fútbol ni de religión ni de política. Para él no debe ser así. “Es complejo, pero hay que invitar a cambiar esa mentalidad, a respetar la idea diferente del otro y a querernos como sociedad”.

El camino para lograrlo es, según Cely, no olvidar de dónde venimos y Los Rolling Ruanas lo dejan claro en cada una de sus canciones. “Nuestra forma de ver la política y la vida no es a través del odio, sino de la unidad. Si cada día tenemos en el corazón al campesino que cosecha las papas que llegan a nuestra mesa, la sociedad puede avanzar mucho”.

El sancocho carranguero de Los Rolling Ruanas

Por acá no escampa tiene un ritmo particular que va más allá del rock y de la carranga. “Es un sancocho carranguero”, dice el tiplista. En este tema además de incluir esa sonoridad que los dio a conocer, también jugaron con la lambada brasileña, melodías orientales y hasta danza árabe. 

No les gusta encasillarse en un único sonido, por eso han explorado mundos como el del rap carranga, y esperan seguir llevando folclor a otros géneros. Incluso, no descartan el reguetón. “Lo que sea que venga es bienvenido, siempre y cuando lleve la raicita campesina y la esencia de lo nuestro: la del campo”, asegura Cely.

Los cuatros están de acuerdo en que mientras sigan juntos harán música a su estilo. O como menciona Vinasco: “tocaremos carranga hasta que se nos ponga el ombligo de chupete y seguiremos usando las ruanas sin importar el género que toquemos o el calor que esté haciendo”. 

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noviembre
12 / 2021