Luego de la segunda temporada, que pasó con más pena que gloria, True Detective, la serie dirigida por Nic Pizzolatto y uno de los éxitos de HBO, regresa con un nuevo caso por resolver.
Esta vez la pareja de detectives conformada por Wayne Hays y Roland West, interpretados por Mahershala Ali (Moonlight) y Stephen Dorff (Blade), inician la investigación por la desaparición de dos niños en un pueblo de Arkansas.
Este caso marcará la vida del detective Hays, por lo cual la línea temporal se cruza entre el momento de la investigación, una década después de la desaparición de los niños, cuando un evento inesperado reactiva el caso, y treinta años más tarde, durante la narración del caso por parte de Hays, ya retirado, a unos periodistas.
En esta nueva temporada regresa el ambiente denso y oscuro de la primera, que sin duda se convirtió en uno de sus sellos característicos. Además, la actuación de Ali, capaz de mostrar cómo los recuerdos del caso afectan a su personaje en tres diferentes etapas de la vida, ratifica su buen momento como uno de los mejores actores de Hollywood.
