¿Cómo un bolso de Drácula de Dior puso a la literatura en boca de todos gracias a Rihanna?

Pablo Montero Cabrera
El pasado 27 de junio, la estrella del pop Rihanna asistió al desfile de AEGE Menswear durante la Semana de la Moda en París, luciendo un bolso de la nueva colección Book Tote de Dior.
Como adelanto promocional, Dior presentó una interpretación especial de la colección a manos del director ejecutivo Jonathan Anderson, que incluía un bolso inspirado en Las amistades peligrosas, novela epistolar de Pierre Choderlos de Laclos, y otro que replicaba la portada original de Drácula, de Bram Stoker. Este último, con el título de la novela en rojo sobre un fondo mostaza, fue el accesorio que Rihanna eligió para el evento.

Más allá del look, el simple acto de llevar el bolso devolvió a Drácula a los titulares: un gesto aparentemente trivial que terminó por promocionar una de las obras clásicas más importantes de la literatura. A propósito de este boom mediático, Diners se preguntó: ¿qué otros famosos han dado visibilidad a la literatura a través de la moda, el arte o sus apariciones públicas?
Desde Natalie Portman con su cartera de Lolita hasta Keanu Reeves con su propia editorial, aquí le contamos las 15 celebridades que, de una u otra forma, han ayudado a poner los libros en el centro de la conversación.
La moda se cose con letras
Al igual que Rihanna, las actrices Natalie Portman y Michelle Williams fueron vistas con bolsos clutch de Olympia Le-Tan, de su colección inspirada en la literatura. En la alfombra roja de Black Swan en 2010, Portman llevó un bolso con la forma de la novela Lolita, de Vladimir Nabokov, con la portada verde oliva y el marco dorado. Dos años más tarde, Williams llevó uno de The Catcher in the Rye, de J. D. Salinger, a los premios Independent Spirit de 2012.
En 2019, las hermanas Bella y Gigi Hadid también fueron captadas con libros durante la Semana de la Moda en París: El forastero, de Stephen King, y El extranjero, de Albert Camus, respectivamente. En aquel momento, la escena desató discusiones en redes sobre si las modelos realmente leían los libros o si simplemente los usaban como complemento para sus atuendos. La posterior aparición de Bella Hadid con un bolso Dior de Las flores del mal, de Charles Baudelaire, podría servir como respuesta.
Otra artista musical que también ha incorporado la literatura en su vestuario es la neozelandesa Lorde, conocida por su canción Royals, quien apareció en los premios Grammy de 2018 con un poema cosido en la espalda de su vestido Valentino.
El texto proviene del Ensayo inflamatorio de Jenny Holzer e incluye frases como: “Solo circunstancias extremas pueden precipitar el derrocamiento de los opresores”. Lorde lució el poema después de que los Grammy le negaran una actuación en solitario, mientras que todos los demás nominados a mejor álbum (todos hombres) tuvieron la oportunidad.
En 2020, Florence Welch, vocalista de Florence and the Machine, colaboró con Gucci en el cortometraje Ouverture of Something That Never Ended. En el corto, Welch entra en una tienda vintage de Roma y escribe fragmentos de poesía, que luego deja dentro de las prendas de ropa.
Literatura leída en voz alta
Otras celebridades son más vocales en la promoción de la literatura. En conmemoración del Día Mundial de la Poesía, el 21 de marzo de 2024, el reconocido actor Willem Dafoe ofreció una lectura pública de poemas de Gabriele Tinti en el Panteón de Roma. Entre los textos seleccionados se encontraban Las confesiones, una serie de versos que evocan las historias de mártires cristianos.
La ganadora del Óscar, Tilda Swinton, también ha demostrado su amor por las letras asistiendo, hasta en tres ocasiones, al Festival Literario de Dhaka. En 2017, leyó fragmentos de obras de John Berger, incluyendo pasajes de The Seasons in Quincy, un proyecto que ella misma financió y codirigió. En 2018, realizó una lectura pública de Last and First Men, de Olaf Stapledon, y en 2023, interpretó un poema de los autores George Baker y Norman MacCaig, que narra su viaje en tren desde Londres hasta Edimburgo.
Y si se habla de celebridades que han puesto voz a la literatura, no podemos dejar por fuera a Michael Sheen. Reconocido por su trabajo en la saga Crepúsculo y, más recientemente, en la serie Buenos presagios, Sheen ha participado en más de treinta audiolibros. Desde ser el narrador de Crimen y castigo, de Fiódor Dostoievski, hasta interpretar a Lucifer en The Sandman, la célebre obra de Neil Gaiman.
Clubes de lectura y más

Tener un club de lectura también es una excelente forma de promover la literatura, no solo entre un grupo de amigos, sino dentro de comunidades más amplias de seguidores.
Una de las primeras celebridades en comprender su impacto fue Oprah Winfrey, quien lanzó Oprah’s Book Club en su programa de entrevistas en 1996, hasta el año 2010. Posteriormente, el club fue relanzado digitalmente en 2012 y retomado en 2019 como una serie de Apple TV+.
Gracias a sus recomendaciones, libros como El fondo del océano, de Jacquelyn Mitchard; Un millón de pequeños pedazos, de James Frey; y La carretera, de Cormac McCarthy, alcanzaron gran notoriedad. Incluso en julio de 2025, su elección de Culpabilidad, de Bruce Holsinger, llevó al libro a los titulares de medios tan influyentes como The New York Times.
Entre las celebridades que han seguido caminos similares están: Emma Watson, conocida por su papel en Harry Potter, con Our Shared Shelf en 2016, enfocado en obras feministas interseccionales; en 2022, la estrella pop Dua Lipa, con Service95, que incluye selecciones mensuales, sesiones de preguntas y guías de lectura; e incluso RuPaul, ícono global del drag, que se sumó a esta tendencia con Allstore.
Otros, como Keanu Reeves, conocido por Matrix y John Wick, han llevado su compromiso con la literatura un paso más allá. En colaboración con la artista visual Alexandra Grant, cofundó la editorial independiente X Artists’ Books en 2017, enfocada en libros de autor, tan bellos como obras de arte, pero también socialmente conscientes.
En 2017, Colin Rand Kaepernick, exjugador de fútbol americano, hizo lo propio, aunque su casa editorial apuntan más a amplificar las voces y experiencias de los autores negros.