Ornella Munar, un ejemplo del poder femenino en las calles de Bogotá

Diners conversó con la artista que actualmente está en la exposición ‘Mujeres al margen’ del Centro Colombo Americano, ubicado en segundo piso del Bulevar Centro Comercial, y que está disponible hasta el 22 de marzo.
 
Ornella Munar, un ejemplo del poder femenino en las calles de Bogotá
Foto: Ser Flores, Ornella Munar
POR: 
Óscar Mena

Ornella Munar camina por las calles de Bogotá con una mirada atenta, exploradora, casi arqueológica. Su arte va más allá de la inspiración mágica, con los pies en la tierra confiesa que se alimenta de la memoria atrapada de un objeto y de referentes icónicos del feminismo, como lo es Mercedes Sosa. Ella los recoge, los observa y los siente en sus manos. Casi de forma periodística entabla una conversación con dichos objetos y encuentra su historia, esa que aguarda ser contada en un gran mural.

“Hago mía la historia de los objetos e imágenes que encuentro en mi camino para interpretarlos y anidarlos a mi proceso. Es como veo el mundo, pero a través de conectar con los ojos de lo abandonado, de los fragmentos, de lo roto y bello de lo cotidiano. De la memoria presente en los restos de lo más mínimo. De encontrarse en el otro”, dice la bogotana.

De Colombia para el mundo

Desde su formación en la Universidad Distrital Francisco José de Caldas, y con su Maestría en Arte contemporáneo, tecnológico y performativo en la UPV/EHU, Ornella ha forjado una mirada singular. Su trabajo es un diálogo entre la materialidad, lo cotidiano y lo extraordinario. No se limita a representar; sino más bien ensambla, transforma y da nueva vida. Así nacieron series como Huéspedes (2014), Muñecas en casa (2016) o Paisajes Vagabundos (2018), todas con un mismo hilo conductor: la magia latente en los objetos olvidados.

A ese proceso creativo le agrega el ejercicio de escucha activa. Escucha la voz de lo que encuentra, permite que la forma y la textura le hablen. “Cuando pinto, cuando ensamblo, cuando animo imágenes encontradas, entro en un estado donde todo fluye, sin expectativa de un resultado concreto”, dice. Es un viaje en el que se deja sorprender, donde cada pieza puede redimensionarse y cobrar un nuevo significado.

El mundo de Ornella

Ornella Munar
Foto: Ornella Munar.

Para Ornella, ser artista es tener un espacio de resistencia y de libertad. Así lo demuestra en el colectivo Las Histéricas y su labor en el Taller de las Moscas, donde refleja su convicción en la creación como acto político. “Significa no estar sola”, afirma. Es el arte como refugio y como trinchera, en otras palabras, un lugar de encuentro y de reconstrucción. Desde allí reivindica la voz de las mujeres, la importancia del cuidado, la conexión con lo espiritual y lo ancestral.

De ahí que en este momento se encuentre como una de las artistas destacadas de la exposición Mujeres al Margen, donde 32 obras sirven de medio de comunicación para mostrar cuál es el poder femenino en las calles, un lugar en donde no es fácil encajar y resulta agresivo y peligroso para las mujeres, así como Ornella lo ha tenido que vivir.

Lea también: Lola: la artista colombiana que impulsa la rebeldía femenina

Sin embargo, esta artista de mirada afable revela que no es lo más difícil de su labor como muralista y artista, sino que lo más complejo es transitar entre diversos lenguajes y disciplinas. En otras palabras, ser imposible de clasificar en el mundo del arte.

Y es aquí donde resulta interesante cómo es que encuentra su fuerza para continuar en el gremio: “Usualmente nos ponen al margen cuando no entramos en un canon establecido, cuando nos movemos entre varios lugares sin pertenecer del todo a ninguno”, dice. Y es en esa hibridez, en esa fuga de lo normativo, donde su obra se hace poderosa.

Más allá de la estética, lo que realmente conmueve en su trabajo es la capacidad de hacer visible lo invisible, de dar voz a lo que se ha silenciado. Ornella Munar no solo crea arte, sino que recupera memorias, reconstruye relatos, resignifica lo que el mundo ha dejado atrás. En sus piezas, lo roto es hermoso, lo olvidado renace, lo pequeño se vuelve inmenso.

Ornella y el arte como terapia

La artista confiesa que en el mundo caótico que puede despertar el gremio encuentra una paz mental. “Me maravillo con lo matérico de la pintura y la mancha, hace que todo simplemente fluya siendo yo un medio para que un mensaje llegue a ser representado”, comenta Ornella y su trabajo que puede ver en su Instagram (@ornella.munar), donde la artista también abre sus redes para mostrar el trabajo de otras mujeres en el mundo del arte.

“Me gusta pensar el mundo del arte como un gran colectivo, que no solo se limite al mundo de la pintura o la serigrafía, sino que entren otras disciplinas para poder complementarnos los unos con los otros. Es la clave para relacionarnos y hacer una apuesta para mejorar como humanidad”, explica la artista.

Para Ornella el mundo del arte es retratar a las mujeres en todas las etapas de su vida. “Creo que las mujeres somos el futuro del mundo porque somos quienes lo hemos cuidado, no solo desde lo maternal, sino por nuestra forma de conectar con la naturaleza, con nuestro cuerpo y con nuestra espiritualidad”, cuenta.Esto hace que la bogotana no pare de trabajar.

Ahora que sale de la exposición Mujeres al margen, Ornella busca su próximo proyecto, ese que empieza con una investigación sobre algo que la inquieta, tal vez un tema que se manifiesta de forma plástica. “Finalmente mi trabajo es traducir los pensamientos en imágenes, sonidos, objetos e incluso jugar como cuando era niña, pero ahora con nuevas herramientas para imaginar”, concluye Munar.

Lea también: Soma Difusa ve el arte en los oficios ancestrales y lo cotidiano de Colombia

         

INSCRÍBASE AL NEWSLETTER

TODA LA EXPERIENCIA DINERS EN SU EMAIL
febrero
17 / 2025