Los planes que tiene que hacer por lo menos una vez si viaja a Cartagena
Revista Diners
Cartagena de Indias. La ciudad amurallada, la heroica, la histórica, la bonita. No importa para cuándo planee su visita. Sea enero, junio o diciembre, siempre será una buena opción recorrer sus calles empedradas, pasear en carruaje, bañarse en sus playas o simplemente admirar las fachadas coloniales que narran por sí solas una importante historia del país.
La ciudad fue declarada Patrimonio Cultural de la Humanidad por la UNESCO en 1984. En ella se viven cada año algunos de los eventos más importantes de Colombia como Hay Festival, el Festival Internacional de Cine de Cartagena (FICCI) y el Festival Internacional de Música.
Con todo este panorama cultural quisimos hacer una lista de planes en esta ciudad del Caribe, para que pueda organizar los días durante su estadía y comprobar lo que la reina del bullerengue, Petrona Martínez, cantaba en su canción: ‘Cartagena es la ciudad que recoge intensas páginas de la historia colombiana, sus bonitas murallas, un mar que brinda sus playas donde el turismo se baña’.
Los lugares que debe conocer
Sin lugar a dudas una de las mejores formas de conocer la ciudad es caminando. Por eso es importante que lleve zapatos cómodos, bloqueador solar, un sombrero que acompañe su visita y una cámara para congelar su paso por allí.
Inicie el recorrido en la Puerta del Reloj o Torre del Reloj, considerada una de las 5 clock towers más hermosas del mundo por la BBC Travel. Construida en 1631, esta estructura es una de las más representativas y hermosas de la ciudad. En su interior, usted encontrará grandes estanterías amarillas de libros, entre esos el de la librería Los Mártires, que desde 1953 guarda secretos del mundo literario y conserva aún algunas de las primeras ediciones de textos de Gabriel García Márquez.
La Torre del Reloj se encuentra entre la Plaza de la Independencia y la Plaza de los Coches, protegida por los bastiones de San Pedro Apóstol y San Juan Bautista, así que estos dos lugares los podrá admirar durante su camino.
Deléitese con los caramelos típicos de la ciudad en el Portal de los Dulces. Su paso por allí estará rodeado de palenqueras y vendedores que le ofrecerán cocadas, muñecas de leche, bolitas de tamarindo y los manjares más sabrosos de la región. De seguro no se podrá resistir a los sabores caribeños.
Termine este recorrido por el casco histórico de Cartagena visitando algunos museos que guardan documentos y esculturas de la historia del país. Conozca el Museo Naval del Caribe que narra la historia de los primeros habitantes de la ciudad, el inicio de la navegación y la creación de la armada colombiana.
Recorra también el Museo del Oro, inaugurado por el Banco de la República en 1982. Su colección guarda los tesoros más bellos de la cultura zenú, compuesta por piezas de cerámica, orfebrería y por su puesto de oro.
Un par de kilómetros al oeste llegará al inmenso Castillo San Felipe de Barajas. Esta estructura es considerada la edificación militar española más grande del Nuevo Mundo. Conozca los grandes túneles, trampas, vías de escape, plaza de armas y un sinfín de atractivos que fueron testigos de batallas épicas. El recorrido dura entre 2 y 3 horas y se podrá hacer en el exterior del castillo o dentro de él.
Luego podrá tomarse una fotografía en el Monumento a los Zapatos Viejos, una obra del artista Tito Lombana en homenaje al satírico poeta cartagenero Luis Carlos López y a su texto más popular, ‘A mi Ciudad Nativa’, que describe profundamente a esta ciudad del Caribe colombiano.
Gastronomía y manglares
Cartagena ofrece una variedad de platos y deleites gastronómicos que no solo resaltan la comida local, sino la internacional. Uno de los lugares recomendados es Café del Mar, ubicado en las murallas del centro histórico. Este sitio lo hará disfrutar de una de las mejores vistas de la ciudad mientras disfruta de unos langostinos al ajillo o del coctel la fantástica, compuesto de ron blanco, jugo de naranja piña y granadilla.
Pruebe también los sabores de la alta cocina en Marea by Rausch, un restaurante de los hermanos Jorge y Mark Rausch que se encuentra en la Bahía de las Ánimas, y que brinda a los comensales platos del mar locales, fusionados con recetas peruanas o del mediterráneo. Pruebe el arroz caldoso de mariscos o los langostinos chorizo con puré de papa criolla, chorizo, maíz, crema de maíz.
Otro sitio ideal para conocer la comida caribeña es Celele, un restaurante de Jaime Rodríguez y Sebastián Pinzón, inaugurado a principios de este año y ganador del premio Miele One To Watch Award 2019, un reconocimiento que lo identifica como un lugar que todavía no está en la lista de los 50 Mejores Restaurantes de América Latina, pero que tiene el potencial para lograrlo próximamente.
Sobre Celele también hay que decir que es el resultado del trabajo de dos cocineros que investigaron durante años las raíces de cocina del Caribe. Recorrieron desde la isla de San Andrés hasta la península de la Guajira, pasando por el Alto Sinú. En este trayecto los chefs conocieron nuevos sabores y los aplicaron a su carta que tiene entradas como la ensalada de queso en capas de Mompox, platos fuertes como la cecina de pato con variedad de frijoles del norte del país y chivo guisado, uno de los favoritos del público.
Otra opción para vivir una experiencia típica de la región es La Boquilla, un lugar ubicado en la desembocadura de la ciénaga al mar a 40 minutos desde el centro histórico. Allí, usted podrá escoger el pescado que desea comer con ayuda de los pescadores que también serán los anfitriones de la cena.
Mientras el plato está listo, podrá bañarse en el mar, apreciar el paisaje de Cartagena en la lejanía y disfrutar de la tranquilidad del lugar. Para llegar a La Boquilla puede ir en auto por la Troncal del Caribe o por la vía Cartagena – Barranquilla.
Visita a un barrio bohemio
El barrio Getsemaní alberga en sus callejones una bohemia y encanto que se percibe en sus fachadas, balcones, caminos de flores y murales de arte. Desde 2013, aproximadamente 25 artistas nacionales e internacionales decidieron intervenir los muros grises de concreto de este lugar.
Getsemaní fue incluído en el listado de los 12 vecindarios más “cool” del mundo la revista Forbes en el 2018. En su reseña comentaron que “Anclado en la Plaza de la Trinidad, una plaza pública animada, Getsemaní aún no está completamente aburguesado, y está habitado por familias que han vivido en la misma casa durante múltiples generaciones”.
Y es que en estas calles habitan personas jóvenes y mayores que han sido testigos del crecimiento cultural y comercial de este barrio, pero no siempre fue así. Durante la época de lucha por la libertad, en este barrio se dieron algunas hazañas de los lanceros, que liderados por Pedro Romero gestaron la independencia de La Heroica.
Una vista panorámica increíble
El Cerro de la Popa es uno de los lugares más icónicos de Cartagena. Es frecuentado por turistas y ciudadanos que desean tener una de las mejores vistas panorámicas de la Heróica. En una colina de 150 metros de alto está el Convento de la Popa, construído por la Orden de Agustinos Recoletos entre 1606 y 1611.
Actualmente esta construcción es una iglesia donde miles de feligreses se concentran para agradecerle y orarle a la Virgen de La Candelaria, patrona de Cartagena. Igualmente, usted podrá comprar souvenirs y algunos recuerdos en algunas casetas adecuadas para la venta en este cerro.
