La exposición de la National Geographic que llega por primera vez a Colombia

Revista Diners
La exposición fotográfica toma algunas de las imágenes del libro El Alma del Océano (2011), una recopilación del trabajo de Brian Skerry, fotógrafo especializado en fauna marina y ambientes marinos, durante los últimos 20 años. La muestra se centra en el rastro de cuatro criaturas que el fotógrafo ha seguido de cerca: el tiburón, la ballena franca, la tortuga laúd y la foca de Groenlandía.
Skerry ha pasado más de 10.000 horas de su vida bajo el agua documentando océanos bajo el hielo del Ártico o en aguas infestadas de depredadores. También ha sido colaborador de la National Geographic desde 1998, es miembro fundador de la Liga Internacional de Fotógrafos de Conservación y en 2015 fue nombrado Embajador de Nikon.
“El Alma del Océano” va a estar exhibida hasta el 21 de abril en Multicentro, Ibagué. Plazoleta Cultural, 2do piso. De martes a domingo de 1:30 p.m. a 8:30 p.m.
Un banco de barracudas merodea cerca de la superficie de las islas subtropicales japonesas Bonin, en busca de trozos de plancton. Japón, 2008.
El pingüino gentú se posa entre las rocas y el hielo. Estos pájaros realizan hasta 450 inmersiones al día en búsqueda de comida. Antártida, 2010.
Un gobio de coral amarillo se asoma a través de la anilla de una lata de refresco. Japón, 2008.
Los miembros de la exposición la apodaron El Jardín de las almejas: esta área poco profunda del arrecife está abarrotada de almejas gigantes que brillan con sus capas de neón. Arrecife Kingman, 2007.
Setenta millas al suroeste de Tokio, una anguila morena se desliza a través de las ramas de un coral suave en las aguas frescas de la Bahía de Suruga, esta bahía desciende a más de 8.000 pies. Japón, 2008.
Esta ballena, de 45 pies de largo y 70 toneladas de peso, nadó muy cerca de Brian Skerry y su asistente, Mauricio Handler. Esta área protegida de las Islas Auckland incluye una población de ballenas francas australes en proceso de recuperación, se cree que allí hay más 1.000 ballenas. Nueva Zelanda, 2007.
A los doce días de haber nacido, las focas pías ya tienen suficiente grasa aislante para empezar a probar las gélidas aguas. A menudo se deslizan en el mar por algunos minutos antes de volver al hielo. Canadá, 2002.
Los cuernos de un par de peces unicornio casi se cruzan mientras patrullan las aguas cercanas al borde del arrecife. Islas de la Línea Meridionales, 2009.