Ancora, una década de vestidos de baño bogotanos
Adrián David Osorio Ramírez
La relación romántica entre Laura Mercado y Juan Manuel Serna ha estado entrelazada por el desarrollo de Ancora, una marca de vestidos de baño que iniciaron un mes después de conocerse y en la que fusionan sus conocimientos en diseño y administración.
Durante nueve años, la pareja ha consolidado Ancora como un referente en el swimwear colombiano. Hoy, la empresa genera más de 100 empleos directos e indirectos, exporta a 17 países en Centroamérica y Norteamérica y cuenta con sedes propias en Miami y Bogotá.
Sin embargo, en su listado de sueños por cumplir hacía falta uno, que se concibió en plena génesis de Ancora. “Siempre que pasábamos por el Centro Comercial Andino, Juan me decía que algún día tendríamos una tienda allí. Yo lo veía muy lejano”, recuerda Laura, directora creativa de la marca.
Este mes, los emprendedores tacharon este ítem de su lista, pues inauguraron su tienda más ambiciosa hasta el momento -bajo el concepto de Flagship Store– en el lugar que siempre visualizaron. “Es un sueño que hoy se hace realidad. Todavía no lo creo”, confiesa la barranquillera.
Una historia anclada al mar
Cuando aún estaba en sus días de colegio, a los 16 años, Laura Mercado comenzó con una idea -inocente y sin pretensiones- de confeccionar vestidos de baño para vender a sus amigas en Barranquilla y conocidos a través de Facebook.
“Crecí en una familia en la que cada fin de semana, por ley, íbamos a la playa. Así que constantemente usaba vestidos de baño. En ese momento no había tanta oferta en el país. Y para una persona costera, en cualquier lugar del mundo, el swimwear tiene mucha relevancia en el armario”, explica Laura.
Este proyecto la llevó a inscribirse en cursos de confección, en donde reafirmó su pasión por la moda. Al terminar el colegio, se mudó a Bogotá para iniciar una carrera en diseño. Fue precisamente durante sus prácticas profesionales que conoció a Juan Manuel, quien estaba finalizando administración de empresas en la Universidad de Los Andes. Ambos aportaron sus experiencias para crear Ancora, un viaje que inició en 2013.
Vestidos de baño de exportación
El éxito de Ancora, según su directora creativa, ha sido debido al “perfect timing”, es decir, que cada paso lo han dado en el momento adecuado. La empresa fue una de las primeras en contar con presencia en redes sociales y vender vestidos de baño a través de Instagram, una plataforma que apenas cobraba relevancia en Colombia.
“Hubo dos factores que nos impulsaron. El primero es que aún no había este boom de emprendimientos. Las marcas de swimwear en Colombia eran 3 o 4 muy grandes y vendían todo presencialmente. Lo segundo es que innovamos en lo digital. Ahora no hay nada innovador en esto pero en ese momento la gente no entendía cómo íbamos a vender las prendas sin tener una tienda”, explica Laura.
El desafío que asumieron Juan Manuel y Laura resultó de manera positiva, pues rápidamente conquistaron clientes en distintos lugares del país. Luego de esto, decidieron apostarle a las ferias internacionales, en donde conocieron a compradores de swimwear de todo el mundo, logrando exportar diseño colombiano a más de 17 países.
De oferta digital a física
Aunque en principio se enfocaron en las ventas en línea, el crecimiento de la marca llevó a sus creadores a ampliar sus oficinas en Bogotá, que convirtieron en la Casa Ancora. Allí, en el barrio La Castellana, es “donde sucede toda la magia”, dice Mercado, desde los procesos administrativos hasta de diseño.
Este modelo lo replicaron hace tres años en Miami, a la par de la creación legal de la empresa en Estados Unidos. “Antes lo hacíamos todo desde Bogotá y los procesos en Norteamérica se demoraban mucho más. Con la nueva tienda y la bodega, los pedidos y devoluciones son más amigables con el cliente”, explica la diseñadora.
Desde entonces, su visión internacional se fortaleció y las ventas en línea en el país norteamericano aumentaron considerablemente. “Me siento muy agradecida con este mercado porque valoran la calidad, el hecho de ser producto colombiano y la sostenibilidad”, afirma.
Este último factor cobró relevancia en la empresa durante la pandemia, tiempo que les permitió analizar temas que no habían podido identificar antes debido a la ocupación diaria de la empresa. “Nos dimos cuenta que para producir un vestido de baño se debía generar plástico nuevo, aumentando la contaminación de una manera impresionante. Por eso optamos por usar licras sostenibles, las cuales reutilizan plástico de botellas pet que se recogen del mar”, explica la barranquillera.
Flagship Store: la nueva apuesta de Ancora
Los diseños inspirados en el Caribe y el estilo de vida costero, que han viajado por el mundo en tiendas y boutiques, ahora tienen un nuevo hogar: el Centro Comercial Andino. Este sitio es la realización de uno de los primeros sueños que concibió la pareja en 2013, cuando crearon la marca.
Para este espacio, la empresa propone el concepto de flagship store. La traducción literal hace referencia a un barco insignia, por lo que en el sector moda, una flagship es la tienda más importante de la firma, que marca una diferencia notoria con las demás.
“En nuestro caso, es una tienda que a nivel de infraestructura y diseño denota más lujo que las demás. A pesar de esto, se consiguen las mismas prendas que los otros puntos de venta”, dice Laura Mercado.
De esta manera, Ancora consolida su relación con Bogotá, la ciudad que vio nacer y crecer este sueño. “Algo bellísimo que tiene Bogotá como plaza es que, a pesar de que la gente no suele relacionar la ciudad con vestidos de baño, la diversidad del mercado bogotano es increíble porque es la casa de toda Colombia”, finaliza la diseñadora.
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