Tres destinos en Colombia para disfrutar del vino nacional

Revista Diners
Colombia es un paraíso diverso desde donde se le mire. Tiene cafetales que adornan las tres cordilleras que atraviesan al país; sus icónicos restaurantes de culto en las principales ciudades y, por supuesto, tres destinos reservados para vivir a fondo toda una experiencia vinícola, que en los últimos años ha tomado protagonismo entre los sibaritas nacionales e internacionales.
Por eso, aprovechamos la ocasión para mostrarle los viñedos más reconocidos de Colombia, que puede visitar en plan de pareja o familiar con el fin de conocer un poco más de esta milenaria tradición gastronómica, sin contar con vivir una experiencia gastronómica que ha incrementado en un 13 % entre los colombianos, como lo señala Booking, uno de los metabuscadores en servicios de hotelería y turismo.
A su vez, el consumo de esta bebida ha incrementado a 43 millones de botellas al año en territorio nacional, es decir, 330 millones de dólares como lo señala la consultora Nielsen. En otras palabras, la mezcla de viajes, con gastronomía y cata de vinos es la próxima gran tendencia turística en Colombia para disfrutar de una manera alternativa e irrepetible sus próximas vacaciones.
A continuación, vea los tres viñedos nacionales que puede visitar:
1. Viña Sicilia (Santa Fe de Antioquia)
A una hora y media de Medellín en carro se encuentra un paraíso para los sibaritas que desean probar los vinos jóvenes y afrutados de la región. Exactamente en el municipio de Olaya es la casa de Viña Sicilia, un viñedo pensado para atender al visitante desde sus acomodaciones que mezclan lujo y tradición, además de contar con un Wine Spa, en el que se ofrece terapias en donde el vino es el gran protagonista.
Sus instalaciones cuentan con vista al cañón del río Cauca y el viñedo cuenta con expertos enólogos que se encargan de explicar los aspectos organolépticos que proporcionan las uvas de este territorio, así como la cuidadosa selección de racimos para producir vinos de 15 meses, añejados en barriles de roble, lo que garantiza las notas de ciruelas maduras, nueces, miel y vainilla.
2. Ain Karim (Villa de Leyva)
En tres horas y media en automóvil desde Bogotá llegará al viñedo Ain Karim, que cuenta con 20 hectáreas de cultivos y espacios recreativos para atender a los sibaritas y entusiastas del vino que lleguen a estas tierras en Villa de Leyva (Boyacá).
De la mano de Andrés Toro, este viñedo empezó en 1988 como un experimento que hoy produce el vino Marqués de Villa de Leyva, que con su línea sauvignon blanc ganó la medalla de oro en el Mediterranean International Wine and Spirit de Israel de 2008.
Los sibaritas del viñedo le explicarán de forma didáctica cómo Toro trajo al mercado nacional las semillas de uva de la región Chardonnay de Francia para producir esta bebida de alta calidad. También podrá conocer a fondo el proceso de producción y la historia de cómo sí se puede hacer vino de calidad tipo exportación en Colombia.
A su vez puede hacer diferentes catas con quesos, chocolates y frutas, con el fin de familiarizarse más con las notas que producen las semillas extranjeras con tierras colombianas.
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3. Casa Grajales (Valle del Cauca)
El 18 de noviembre de 1977 se fundó Casa Grajales, el productor pionero de vinos colombianos, el mismo que a la fecha produce 6 millones de litros anuales para el consumo interno en el país. De La Unión, Valle del Cauca, para el mundo este viñedo se ha encargado de crecer con paciencia hasta convertirse en un referente de la industria vinícola de Latinoamérica, contribuyendo al mercado y a procesos de los que obtienen las mejores calidades de vinos.
En su visita podrá ver todo el proceso de producción, donde pasa de las bodegas de vinificación hasta el embotellamiento, además de recorrer el Museo de Vino y El Parque Nacional de la Uva, diseñado para toda la familia.
De esta forma podrá viajar, disfrutar del viñedo en persona y conocer las diferentes cepas de uva que se pueden encontrar en Colombia y el mundo y, por supuesto, cata con expertos sibaritas los vinos de la casa con sus respectivas notas de sabor.