Creando tecnología con plastilina y cartón

Revista Diners
Los videojuegos y el entretenimiento para los niños están llegando a otro nivel. Nintendo se ha dado cuenta de esto, y por eso diseñó Nintendo Labo. Una propuesta que en principio generó muchas dudas, pero que se ha convertido en una alternativa atractiva para juntar la tecnología con las manualidades.
Nintendo Labo es un kit que le permite a los jugadores crear periféricos o extensiones con piezas de cartón, diseñadas para que sean compatibles con el Nintendo Switch. Existen tres de estos kits: Variety kit, Robot kit y el lanzamiento más reciente, el Vehicle kit.
Los kits consisten en piezas que cartón que al ensamblarse crea piezas que los jugadores pueden usar como carros, instrumentos musicales, incluso muchos usuarios han desarrollado sus propios inventos para usar con el nintendo.
Desde su lanzamiento, Nintendo ha vendido 1.39 millones de unidades entre los dos primeros kits, lo que no se considera como un éxito en ventas, pero sí como una buena salida para un producto experimental.
“Queremos llegar a un grupo demográfico al que los juegos no llegan tradicionalmente. Creo que en este momento hay algunas personas que conocen Nintendo Labo y aún tenemos mucho potencial por explorar. Las personas que conocen Nintendo Labo ahora mismo, creo que todavía están en el círculo de fanáticos de Nintendo y seguidores de los videojuegos en general. Estamos realmente interesados en cómo podemos ir más allá de eso”, comentó Shinya Takahashi, gerente general de la división de software de Nintendo, al portal especializado en tecnología, The Verge.
Nintendo Labo no es el único ejemplo de cómo las compañías se han dado cuenta que juntar la tecnología con el arte es una buena opción para desarrollar la imaginación de los niños a través del juego.
Varias compañías como Technology Will Save Us, Little Bits, Makey Makey y Adafruit, entre otras, han llevado a otro nivel la unión entre tecnología y manualidades.
Technology Will Save Us es una compañía inglesa fundada en 2012 cuya misión es inspirar a los niños y las familias a construir y experimentar. Sus juegos están enfocados en los niños pequeños, para que a través de ellos puedan descubrir las posibilidades de creación mediante del juego. Incluso han desarrollado una masa conductora, que se puede moldear como plastilina, y que permite crear proyectos electrónicos.
Su trabajo en programación también es uno de sus fuertes, ya que junto a la BBC han trabajado en el ‘micro:bit’, un microprocesador con el que buscan involucrar a los niños de 11 años en adelante en la creación de código.
Little Bits es otra de las compañías que han creado kits para desarrollar diferentes artefactos. Su catálogo tiene desde amplificadores de sonido, hasta juegos de video. Lo interesante de esta marca es que cada kit se puede utilizar en la construcción de algo nuevo, ya que las piezas se pueden ensamblar fácilmente gracias a los imanes que tiene cada pieza de cada kit.
Muchas de estas compañías tienen kits en los que incluyen microprocesadores que pueden ser programados para cumplir diferentes tareas y que, combinadas con los kits, funcionan como inventos nuevos.
Estas marcas y muchas más alrededor del mundo han hecho que las comunidades makers, es decir grupos de personas que se dedican a crear sus propios inventos y a impulsar la iniciativas de DIY (Do It Yourself), crezcan y se organicen alrededor de todo este movimiento.
¿Cree que la unión entre videojuegos y arte pueda ser una nueva oportunidad para aprender sobre desarrollo tecnológico? Escríbanos en el recuadro de comentarios