La verdad sobre comprar tecnología reacondicionada o de segunda
Óscar Mena
Juan Esteban es un fanático de la tecnología. Desde que se despierta hasta que vuelve a la cama está revisando noticias de nuevos lanzamientos de celulares, consolas de videojuegos, relojes inteligentes y hasta aspiradoras automatizadas. Sin embargo, también es consciente que en estos días donde la economía está volatilizada no es negocio comprar un celular de siete millones de pesos, por lo que le apuesta a la tecnología reacondicionada o de segunda.
“Sé desde el principio que se trata de un aparato que salió defectuoso de fábrica o que lo usó otra persona, pero que tuvo la intervención de técnicos certificados para solucionar esos problemas, por lo que vuelven al mercado en un 20 o 40 por ciento más económico de su precio original”, comenta Juan Esteban, quien compró un iPhone X de 64 GB a $1.500.000, es decir $500.000 pesos por debajo de su precio original a través de la página Refurbi de Celuventas Colombia S.A.S.
En la página de Refurbi, le dijeron a Juan Esteban que el celular tenía algunos rayones por el uso del anterior usuario, pero que era 100 % funcional. Esto no le gustó de a mucho, porque probablemente el anterior dueño lo dejó caer en más de una ocasión, por lo que decidió comprar una garantía extendida de 14 meses -por $500.000 pesos- por si llegaba a fallar en un futuro cercano.
“Cuando llegó el celular estaba en perfectas condiciones, incluso pensé que era nuevo. Sin embargo, cuando lo empecé a utilizar me di cuenta que se descargaba muy rápido. Apenas me dura de 6 a. m. hasta las 8 p. m. y cuando lo pongo a cargar se calienta muchísimo. Aún así, estoy feliz por mi compra, porque quería tener este iPhone”, explica Juan Esteban, que al igual que otros usuarios corren ese riesgo con la tecnología reacondicionada o de segunda.
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¿Estos celulares son de legal procedencia?
Así como Refurbi, existen varías empresas en Colombia que se dedican a comprar celulares de segunda mano o grandes lotes de celulares defectuosos para repararlos y ponerlos nuevamente en circulación. Es el caso de Clevercel, Mastronics, Linio, Flamingo y Éxito, entre otras empresas que se dedican a este negocio.
“Nosotros tenemos una empresa en la que le apostamos a la economía circular por el bien del medio ambiente. Nuestros celulares se los compramos a los usuarios que puedan comprobar que lo utilizaron ellos y que no se trata de un celular robado. Luego, el aparato pasa por nuestros técnicos para testear su vida útil y lo ponemos otra vez en el mercado a un precio más bajo, pero con la misma calidad y garantía de un equipo 100 por ciento funcional y seguro”, comenta Jorge Palacio fundador de Clevercel.
No son solo celulares
Camilo, un fanático de los videojuegos, compró hace 10 años una consola Xbox One a $600.000, en otras palabras por la mitad del precio original de aquel entonces. Él pensó que se trataba de una promoción de la tienda y cuando llegó a casa vio que tenía una etiqueta enorme que decía “Refurbished in México”. No le prestó mucha atención y empezó a jugar sus títulos favoritos.
“Después de cinco años, un amigo me preguntó cómo me había salido mi consola de segunda. Muy molesto le dije que no era de segunda y me dijo que entonces por qué tenía esa etiqueta de reacondicionado. Me quedé pensando y averigüé más del tema y todo tenía sentido. La consola era un producto defectuoso que arreglaron y pusieron nuevamente a la venta en una gran superficie y no me importa porque tiene más de una década y sigue igual de rápida y eficiente como el primer día”, explica Camilo.
Actualmente AliExpress tienen toda una sección de consolas reacondicionadas por un precio menor al original. Por ejemplo, puede encontrar una Xbox XSeries o una PlayStation 5 en apenas 20 % más económico, lo que traduce en una promoción envidiable, frente a los precios actuales de estos productos que están en $1.599.000 y $3.499.895 en tiendas oficiales.
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Hay que leer la letra pequeña
“Tanto en nuestros puntos físicos, como en nuestros canales de venta digital y redes sociales aclaramos que existen tres categorías para comprar celulares y otros aparatos tecnológicos. El primero es Como nuevo, que muestra celulares con muy pocas o nulas marcas de uso; el segundo es Seminuevo que tiene unas marcas visibles muy pequeñas y el tercero es Outlet, que son equipos 100 por ciento funcionales pero con rayones visibles. Todo esto con el fin de ser lo más transparente con nuestros clientes”, comenta Jorge Palacio de Clevercel.
Algo similar sucede con Refurbi y Mastronics que ofrecen celulares, tablets y relojes inteligentes reacondicionados que dan la sensación de estar nuevos. Cada una de estas empresas ofrece garantías sobre los equipos entre 6 a 12 meses y los usuarios pueden comprar garantías extendidas para cambiar el celular por si deja de funcionar.
“A mí nunca me respondieron por las garantías prometidas. La mayoría de los casos no se hacen efectivas porque se supone que uno compra sabiendo cómo viene el celular. Si bien, bajan un poco los precios es muy alto el riesgo de que salga defectuoso y uno tenga después que pagar el excedente del arreglo, como me pasó a mí y el botón de encendido que no funcionaba”, comenta Cristian, quien compró un Samsung Galaxy S10+ en Clevercel y no obtuvo respuesta por parte de la compañía.
La obsolescencia programada sí existe
En este punto vale la pena aclarar que la tecnología falla, no importa si está comprando un celular nuevo o uno reacondicionado, todos tienen un porcentaje mínimo de probabilidades de salir defectuoso. Entonces si desea comprar tecnología de segunda, puede que le salga buena como puede que no, solo asegúrese de leer la letra pequeña y aceptar que se trata de un celular que no es nuevo.
Eso sí, evite comprar a través de los marketplaces de Facebook para no ser víctima de estafas o comprar productos robados. Elija por encima las marcas oficiales o estas empresas que se dedican a reacondicionar equipos por la economía de los usuarios.
También tenga en cuenta que se trata de una buena alternativa de minimizar la basura electrónica en el mundo, que según el último informe The Global E-waste Monitor, cada año se producen 53,6 millones de toneladas métricas de residuos electrónicos, de los que apenas el 17,4 por ciento se recicla de forma adecuada en el último año.