Cali Exposhow, una pasarela de variado talento
Adelanto especial para Diners de lo que se verá en los desfiles.
“Vestía un traje de muselina ligera, casi azul, del cual solo se descubría parte del corpiño y la falda, pues un pañolón de algodón fino color de púrpura, le ocultaba el seno hasta la base de su garganta de blancura mate”. Así iba vestida María, la prima de Efraín, cuando el protagonista de la más famosa novela romántica colombiana regresa de estudiar en Bogotá y se reencuentra con su familia en su finca de infancia en Cali. Esta escena sucede en la segunda mitad del siglo XIX. Su autor, Jorge Isaacs, comienza en 1867 a escribir “María”, la obra que dejaría su nombre impreso para siempre en la historia de la literatura continental.
Tanto la descripción física de la niña que trastornó el corazón de Efraín como la del resto de personajes que aparecen en esta historia insisten en el vestuario para demarcar el territorio esencial de cada uno. Como cuando Efraín asiste con su padre a la fiesta que celebra el matrimonio de dos trabajadores –esclavos, como los llamaban en la época- de sus tierras “… Remigia y Bruno: ella con follado de boleros azules, tumbadillo de flores lacres, camisa blanca bordada de negro y gargantilla y zarcillos color de rubí… Bruno, doblados sobre los hombres los paños de su ruana de hilo, calzón de vistosa manta…”.
La moda retratando cada época, una ciudad, el grupo social, la vida íntima. Es emotivo encontrar en el hotel convertido en sede de quienes venimos a trabajar en Caliexposhow, una muestra de los vestidos que lucían los personajes de Isaacs. Está el negro de tafetán, bordado y recubierto de pasamanería; también se aprecia un vestido estampado en florecitas sobre verde de algodón sencillo y uno blanco con frunces y encaje sobre el pecho. Lucen tan farragosos como el estilo narrativo propio de la época decimonónica: espesos, de un realismo descriptivo agotador, de un lirismo llevado al extremo. Ingenuidad trenzada con un drama existencial.
Muy distinto todo esto a lo que revela este siglo XXI en materia de moda (por no hablar de literatura). Por los pasillos del Centro de Eventos Valle del Pacífico donde tiene lugar la feria organizada por Fenalco (entidad que agrupa a comerciantes del departamento del Valle del Cauca en Colombia), las mujeres siguen optando por tops cortos y ajustados, faldas más cortas todavía o pantalones que resaltan “colas” sin compasión.
Eso sí, en el desfile de inauguración de esta nueva versión de Caliexposhow hubo despliegue de “producciones”. Una mezcla que retrata bien la confusión que tiene el público para asistir a este tipo de citas. Pero que también revela el sello de nuestra época: libertad y personalidad son dos asuntos diferentes que no siempre empatan bien. Por eso nos vemos tan repetidos y tan distintos al tiempo. Había quienes eligieron, con vestidos largos de coctel, hacerle un guiño al dúo americano de diseñadores que creó hace veinticinco años la firma Badgley Mishka, invitados internacionales en Cali. Y hubo mini-vestidos, ¡cómo no, negros! y ¿faldas largas con blusones?. Quizá el que mejor lucía en los asientos de primera fila de la pasarela era el enterizo en seda de rayas marineras vestido por la empresaria y ex modelo Adriana Arboleda. Una pieza que contenía la información justa sin brillos ni informalidad para un desfile que tuvo mucho de lo primero, nada de lo segundo y que no registró, sobre todo, emociones importantes.
Badgley Mischka ofrece en su portal on-line de todo, como ocurre con las firmas hoy en día: gafas, vestidos de baño, zapatos, carteras y prendas. Como su fuerte son los vestidos de noche y los de novia, su desfile se concentró en una muestra (muy larga, sesenta salidas) que combinó la colección primavera-verano 2015, recién presentada en la semana de la moda en Nueva York (hasta el estilismo de las modelos fue reproducido en detalle con las melenas sueltas y mechones coloreados en azul o rojo) con piezas de colecciones pasadas. Un desfile de los que llaman pomposamente “retrospectiva” aunque no reproduzca fiel ni cronológicamente las épocas de la marca.