El Bardo Bogotá, el restaurante para probar parrilla árabe

Este restaurante, ubicado en la Zona G, ofrece una carta donde las carnes son las protagonistas. Conozca sus mejores platos aquí.
 
El Bardo Bogotá, el restaurante para probar parrilla árabe
Foto: Cortesía El Bardo
POR: 
Óscar Mena

En El Bardo no hay tapetes, cojines, lámparas de araña o trajes típicos en sus meseros, como sucede en la mayoría de los restaurantes árabes tradicionales. Aquí el concreto, los ladrillos descubiertos de sus paredes y su fachada de metal con apliques de madera le dan un aspecto moderno y fresco, que llaman la atención de los transeúntes que pasan por la Zona G (Calle 69 a #5 -59), en Bogotá.

Su menú tampoco tiene nombres pretenciosos para confundir al comensal ni platos extravagantes que usted jamás ha escuchado. El Bardo busca entregarle el sabor tradicional de Medio Oriente con carnes, verduras e ingredientes nacionales, combinados con técnicas de alta cocina.

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“Los platos de El Bardo nacieron durante mi época universitaria en Bogotá. Extrañaba mucho la sazón árabe de mi casa. Así que empecé a llamar a mi mamá para que me dijera las recetas que me hacía. Con el tiempo fui desarrollando cada uno de los platos donde las carnes eran las protagonistas”, cuenta Farid Elhaje, dueño del restaurante, cocinero empírico e hijo de padres libaneses.

Fue así como Elhaje llevó sus recetas de familia a un restaurante donde devela los auténticos platos de la cocina árabe con un toque sutil de especias, ideal para todos los gustos.

“Muchos restaurantes de la ciudad eligen solo un plato de los 50 que te ofrecen en Medio Oriente y se trata de una entrada que vuelven un plato fuerte. En El Bardo queremos ofrecerle a los comensales una experiencia real donde puedan disfrutar un buen corte de cordero, res, pollo y salmón, acompañados de entradas clásicas”, dice Elhaje.

Lo que hay que pedir en El Bardo

Uno de sus platos insignias es el mixto zam zam, una variedad de hummus (garbanzos, pesto, remolacha y pimentón) acompañado con croquetas falafel, queso halloumi frito, kibbeh de res, tabbouleh de quinoa y pita chips, o los envueltos de parras (hojas de uva) rellenos de cordero y arroz, acompañado con un yogur, ideales para compartir.

Otro fuerte es el bardo steak, parrillado y enrollado, servido sobre hummus y chermoula de menta (chimichurri) y con un terminado de almendras por encima; también pruebe el Pollo marroquí que viene el escalope de pollo relleno de aceitunas, uvas pasas y tomate cherry parrillado en una salsa agridulce (ligeramente picante).

Por otro lado, El Bardo ofrece una opción árabe vegana: el Nabati, la combinación equilibrada de falafel y kibbes hechos con papa, cebolla y garbanzo, bañados en una crema de ajonjolí, limón y un toque de guatila encurtida en vinagre, sobre hummus de remolacha.

Para cerrar, un postre que no empalaga, Baklava, un pastel relleno de marañón y acompañado con un helado booza (hecho a partir de almáciga y con textura elástica).

Para pasar la tarde

La antigua tradición del Imperio Otomano rezaba que quien fumara narguile con el sultán, estaba viviendo uno de los mayores honores que podía haber en Medio Oriente. El Bardo recoge esta tradición y se la presenta para acompañar una tarde de trabajo o un reencuentro de amigos.

La narguile, que tiene carbones hechos con cáscara de coco, la puede acompañar con una oferta variada de ginebras y tónicas, más una selección especial de cocteles pensados por Elhaje, como por ejemplo, uno hecho a base de ron, con sabor avellanado, servido en un vaso ahumado con esencia de narguile de uva y un toque de marañón.

“Mi intención principal es que la gente disfrute de verdaderos platos árabes y contar mi historia, de ahí viene el nombre del lugar, porque el Bardo, era este personaje que iba de pueblo en pueblo relatando la historia de su tierra, así como yo lo hago con mis platos”, comenta Elhaje.

Detalles que atrapan en El Bardo

Vale la pena destacar que cada propuesta gastronómica, desde la entrada hasta el coctel, están acompañadas de un poema que acompaña la experiencia. “Todos los platos vienen con un poema de autores nacionales, internacionales y poemas clásicos de Medio Oriente. Puede ser un mensaje de amor, reflexión o de ironía”.

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abril
1 / 2024