Un puro whiskey

El nombre de Matthew McConaughey es sinónimo de talento, trabajo incansable y masculinidad. Nacido en Texas hace 47 años, el ganador de un premio Óscar es un actor versátil. Sus papeles, desde un vaquero al que se le diagnostica sida hasta un detective de Luisiana, han dejado huella en el mundo de Hollywood. Por esto, y por unas cuantas razones más, la marca norteamericana de whiskey, Wild Turkey, lo eligió hace exactamente un año para ser su imagen.

Ante la propuesta, McConaughey no podía contestar otra cosa distinta a que no quería ser solo una cara. “Tengo ideas, soy un hombre de ideas, quiero ser parte de la historia”, afirmó con su singular tono de voz. Así que lo nombraron director creativo de la campaña publicitaria. El mensaje del actor rescata la autenticidad y tradición del bourbon y el lema es “Wild Turkey te encontrará a ti”. También elaboró un cortometraje de un poco más de seis minutos junto a Jim Rusell y su hijo Eddie, la familia encargada de preservar la tradición durante más de sesenta y dos años de esta destilería, y el único dúo de maestros destileros de este whiskey en el mundo.

Y es que este trago se considera realmente especial. El proceso comienza desde la selección de los mejores ingredientes, no utilizan granos modificados genéticamente, de maíz, centeno y cebada, para destilar. El agua filtrada de piedra caliza se extrae del río Kentucky y se usa para triturar y elaborar la malta. Al final, tiene un 40,5 % de volumen de alcohol y un envejecimiento entre seis y ocho años en barricas de roble americano que potencian los sabores de vainilla y caramelo. Es recomendable beberlo solo o con un poco de hielo, en un vaso de cristal bajo y ancho, aunque también puede degustarse en cocteles, como el Manhattan, el Mint Julep o el Kentucky Devil (ver receta).
Todo tiene un comienzo

En el siglo XVIII, sin pensar que se volvería tan reconocido, un reverendo bautista de origen escocés, llamado Elijah Craig, empezó a elaborar un destilado de color ámbar, de granos de maíz, centeno y cebada, en Kentucky, Estados Unidos. La fama de su preparación, que cuenta con agua pura y cristalina, creció como espuma y los mercaderes comenzaron a llamarlo bourbon, por el nombre del condado donde Craig tenía el alambique.

En 1869, los hermanos Ripy abrieron su destilería en la colina Wild Turkey en Lawrenceburg. Sin embargo, la marca como tal obtiene su nombre solo en 1940, cuando a un ejecutivo se le ocurre compartir su bourbon con sus amigos en un viaje de caza y le piden probar más. En 1954, el maestro Jimmy Russell, tercero en la línea de los destileros, y quien aprendió el oficio de Bill Hughes y Ernest Ripy, entra a la empresa, que ahora es propiedad del Gruppo Campari. Desde entonces ha conservado la tradición de este oficio y ha lanzado diversos productos, como Diamond, una edición para celebrar sus sesenta años en la destilería, que combinaba bourbon de 13 y 16 años.

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¿Cómo sentir el bourbon?

Respire dentro del vaso profundamente. Luego adicione un poco de agua para liberar más notas de sabor y respire de nuevo. Usted sentirá el olor a vainilla y roble, con toques de cítricos y caramelo. Tome un sorbo. Notará que es rico en vainilla y caramelo, con un ligero sabor ahumado. Un buen bourbon persiste en la lengua y Wild Turkey es conocido por su largo, rico y completo final.

• En coctel
Si prefiere tomarlo en coctel, le recomendamos que pruebe esta receta:

• Kentucky Mule
2 onzas de Wild Turkey Bourbon
¾ de onza de sirope de jengibre
¾ de onza de jugo de limón recién exprimido
1 pizca de Amargo de Angostura
Soda

Mezcle todos los ingredientes en una coctelera con hielo. Agite y sirva en un vaso alto. Adorne con lima y ramitas de menta.