¿Por qué es importante aplicar el ‘Poka Yoke’ a nuestros hábitos?
Revista Diners
Son las 6:00 de la mañana. El despertador suena y comienza un día más. Luego de un baño viene la primera decisión del día, elegir qué ropa llevar al trabajo: un traje oscuro o uno claro, una camisa a rayas o a cuadros, una corbata estampada o de un solo tono. Luego de varios minutos, hay pensar en qué desayunar: café, chocolate, jugo de naranja o cereales. Y después qué transporte tomar, qué almuerzo elegir. Y así, una lista que podría resultar interminable, dada las múltiples acciones que se realizan a diario.
A grandes rasgos, así es la rutina cotidiana de muchas personas pero no es la de un exitoso empresario o por lo menos de aquel que utiliza el Poka Yoke. Esta técnica nació en los años cincuenta en la mente del japonés Shigeo Shingo, un ingeniero industrial de Toyota, que se las ingenió para crear un sistema que disminuyera los errores en la producción de los automóviles. Su método fue tan efectivo que otras empresas comenzaron a aplicar este sistema con sus trabajadores y luego los grandes empresarios lo aplicaron a la vida cotidiana.
Es el caso del ex presidente de los Estados Unidos, Barack Obama, quien utiliza solamente dos clase de vestidos: “Verás que sólo llevo trajes grises o azules. Estoy intentando recortar decisiones. No quiero tomar decisiones sobre qué voy a comer o llevar porque tengo muchas otras que tomar decisiones. Necesitas concentrar la energía que usas para tomar decisiones. Necesitas crearte una rutina para ti mismo. No puedes estar distraído a lo largo del día por cosas triviales”, afirmó en una entrevista a Vanity Fair.
Marck Zuckerberg, el genio de Facebook, es otro de los personajes interesados en esta técnica. En una entrevista con fanáticos de la computación en sus oficinas en California, un joven le preguntó que porqué vestía igual todos los días. “Realmente quiero simplificar mi vida de manera que tenga que tomar el menor número de decisiones. Estoy en una posición muy afortunada, que me permite levantarme cada mañana y ayudar a servir a más de mil millones de personas. Siento que no estoy haciendo mi trabajo si gasto mi energía en cosas tontas o frívolas de mi vida”, aseguró.
Estas palabras que usó Zuckerberg para defender su elección de utilizar jeans y camisetas grises también las comparte el diseñador más aclamado de Chanel, Karl Lagerfeld, quien viste siempre de negro, corbata, camisa blanca y gafas de sol. Esto, según sus propias palabras, se debe a una cuestión de identidad de marca, pero también para priorizar en su mente nuevos diseños y confecciones.
¿Cómo aplicarlo?
Si le gusta la idea de optimizar su rutina dejando atrás las decisiones triviales tenga en cuenta estos tres consejos. Puede parecer extremo, pero si quiere focalizar su energía en decisiones importantes, esto le servirá.
Cambios radicales
Modifique su entorno para optimizar el hábito que quiere adquirir. Esto quiere decir que si desea cambiar algo en su rutina tiene que acabar con los distractores de manera radical, por ejemplo: si quiere dejar de ver televisión, quite la televisión; si quiere adelgazar, quite de su alacena el azúcar; si quiere leer sin distracciones desconecte el teléfono y enciérrese en su habitación. Si enfoca su mente en una sola cosa le será más fácil concentrarse.
Tenga un horario estricto
Este paso consiste en medir el tiempo que gasta en las rutinas que tiene que hacer todos los días, por ejemplo: diez minutos bañándose, cinco minutos vistiéndose, desayunar en diez minutos. Cuando encuentre un tiempo constante y un número determinado de movimientos se convertirá en una rutina sistemática a prueba de errores. Esto quiere decir que si algo se sale de esa rutina es porque se trata de un problema externo como quedarse sin agua para ducharse. Si bien parece algo estricto, esta función libera la necesidad de pensar y enfocarse en resolver los problemas que realmente son prioridad.
Lista de rutina
Es importante tener una lista que ordene los pasos del día, esto ayuda a despejar la mente y seguir un orden establecido, que por lógica, optimiza el tiempo de ejecución de los hábitos.
Un listado le ayudará a optimizar tareas como, por ejemplo, los pasos que sigue al levantarse de la cama: despertarse, lavarse los dientes, desayunar, ducharse, vestirse y lavarse los dientes. Si se da cuenta la acción de lavarse los dientes está repetida dos veces, cosa que, por lo general, hacen las personas sin caer en cuenta. Es por eso que una lista le podrá ayudar a ordenar su día a día de forma mucho más efectiva.
¿Le gustaría practicar el Poka Yoke? escríbanos en el recuadro de comentarios