Don Juan: el siguiente paso en la carrera de Maluma

Había una incógnita que no dejaba descansar a Frankie Ruiz y que plasmó en su canción Cómo lo hacen. En este himno del género, el salsero de origen puertorriqueño describe a un hombre y a una mujer con un estilo de vida que no logra explicar: viven bien, visten a la moda, vacacionan en Europa, tienen carro francés, pulseras de oro, casa de lujo y se gozan la rumba con un swing sabroso. Cuarenta años después del lanzamiento de la incógnita, el reguetonero antioqueño Maluma la hace suya e intenta resolverla desde su nuevo alter ego, con el que publica su sexto álbum de estudio.

“¿Que cómo lo hice? Trabajando (…) Disciplina y sacrificio. La tenía clara, lo supe desde el inicio”, dice en los primeros minutos de su nuevo disco.

A Don Juan, la declaración musical con la que comienza el álbum del mismo nombre, le sigue un viaje por distintos sonidos —19 canciones inéditas y 6 de sus hits más recientes—, con una base clara en el género urbano: hay algo de merengue en Coco loco, regional mexicano en colaboración con Carín León; un poco de tech house en la canción que creó junto al DJ guatemalteco Gordo; una oda al reguetón de los años dos mil con Don Ómar e indudablemente influencias de la salsa, como en el dueto con Marc Anthony, un género que tiene un lugar importante en la vida del paisa.

Pero detrás de todos sus alter ego permanece Juan Luis Londoño Arias, un joven que creció entre las prácticas de fútbol en las divisiones menores del Atlético Nacional y las tarimas de fiestas de quince años en Medellín.

En 2011, su sencillo Obsesión se convirtió en un infaltable de las fiestas colombianas, y en 2012 lanzó Magia, su primer álbum. Al igual que en Don Juan, el disco comenzaba con una contundente declaración sobre sí mismo: “Tan solo diecisiete y mi primer álbum la Magia (…). Mucho gusto, me presento, Juan Luis. Ahora soy Maluma por culpa de mi talento”.

Cuestión de tiempo para Maluma

En cuatro meses, Maluma celebrará su cumpleaños número 30. Los últimos doce años han transcurrido frente al ojo público, que lo ha visto mutar de piel en distintas ocasiones. Comenzó siendo el Pretty Boy, Dirty Boy, para luego convertirse en Papi Juancho y ahora en Don Juan, un personaje que, como él, se percibe más maduro, racional y sólido, y que ha debido hacerles frente a controversias como la que generó con la canción Cuatro babys.

Su nombre artístico es bien conocido en todo el mundo y sus canciones se han coreado en escenarios repletos, como el Madison Square Garden de Nueva York, The Forum en Los Ángeles y Yarkon Park en Tel Aviv, el estadio más grande de Israel. Lo invitaron, además, a hacer el show musical del gran premio de la Fórmula E del Diriyah E-Prix 2019, con el que congregó a 25.000 personas en Riad (Arabia Saudita), y batió el récord de asistencia a un concierto en Marruecos, con 200.000 personas en el 18.º Festival Anual Mawazine en Rabat.

Con la música como eje central de su carrera, Maluma se ha permitido explorar otras facetas. El año pasado debutó en la pantalla grande al protagonizar la película Marry Me, de la mano de la también cantante Jennifer López y el actor Owen Wilson, trabajo que se sumó a su doblaje de voz para Encanto, la cinta inspirada en Colombia que ganó el Premio Óscar a mejor película de animación.

Y como todo Don Juan, Maluma cuenta con su propio emporio empresarial: Royalty, una compañía que incluye inversiones en la industria de la gastronomía, la moda, startups, la crianza de caballos, hotelería y música. Dembow, su cadena de hamburguesas, está presente en 17 ciudades de Latinoamérica, y Contraluz, la marca mexicana de mezcal que adquirió en 2022, produce un mezcal cristalino reposado en barricas de roble americano y filtrado en carbón activado.

Sus riesgos estilísticos le han valido que la revista Vogue lo llamara “la nueva musa de la moda masculina”, al igual que protagonizar campañas publicitarias de grandes casas de moda como Calvin Klein, Dolce & Gabbana, Versace y Boss, acompañado por supermodelos de la talla de Naomi Campbell, Bella Hadid y Kendall Jenner.

“Cuando conocí a Maluma por primera vez, inmediatamente sentí su energía y su cautivadora personalidad. Es un hombre que piensa en el futuro y nunca tiene miedo de desafiarse a sí mismo”, dijo la diseñadora italiana Donatella Versace en un comunicado el año pasado.

Con Don Juan, Juan Luis Londoño asume más que nunca su rol como ícono de la música, la moda y el entretenimiento, un personaje que presentará durante Don Juan World Tour, la gira que comenzó el pasado 31 de agosto en Estados Unidos y con la que llevará su nueva era por todo el mundo.

No cabe duda, entonces, de que Maluma cumple todas las características de aquel personaje que describe con detalle Frankie Ruiz en su canción: viaja por aire y por mar, tiene diamantes por dondequiera y, sobre todo, se goza cada momento de su vida. ¿Cómo lo hace? Queda todavía la duda, pero algo de esto le contó a Diners en la presente entrevista.

En cada uno de sus álbumes nos ha presentado una faceta diferente: en 2015 era Pretty Boy, Dirty Boy, en 2020 fue Papi Juancho y ahora, en 2023, es Don Juan. ¿Cómo es el Juan Luis que creó este álbum y qué tan distinto es el de 2015?

En 2015 estaba en una búsqueda de mi sonido, estaba comenzando mi carrera, pero sabía hacia dónde me dirigía. El Juan Luis de hoy es una versión mejorada de Papi Juancho, que fue muy emocional; el de ahora es un hombre que toma decisiones con calma, más sensato.

Don Juan es un álbum en el que explora géneros distintos del reguetón. ¿Cuál fue la dirección que tomó para escoger los sonidos del disco?

Es un álbum que nos lleva a mis raíces latinas y colombianas, eso busqué desde el principio. Es más diverso, muestra de lo que estamos hechos.

Dos comentarios al respecto de este disco que ha repetido en sus redes sociales es que “es el álbum más HP de mi carrera” y “es una pieza de colección”. ¿Por qué? ¿Cuál es la diferencia sustancial entre Don Juan y sus anteriores trabajos discográficos? 

Este no es un álbum que se hizo a las carreras. Por el contrario, es un álbum para el que me tomé dos años cuidando todo, desde colaboraciones, productores, hasta con quién quería grabar. Tiene un ADN sensato para mí y para el mundo de Don Juan. 

En alguna ocasión dijo que el álbum debió haber salido antes. ¿Qué pasó en el proceso de creación que lo llevó a tomar la decisión de dejar la prisa por el lanzamiento? 

Fueron llegando más canciones, una mejor que otra, y por eso decidí tomarme mi tiempo. La calma fue mi mejor amiga para Don Juan, y espero no equivocarme. Y si me equivoco, pues al final del día pensaré que todo tiene un propósito y lo hice con amor. 

Junto al lanzamiento del álbum comienza una gira por treinta ciudades de Estados Unidos. ¿Cómo es su vida en medio de un tour? ¿Qué tipo de rituales tiene para presentarse frente a miles de personas cada noche?

Estoy concentrado ciento por ciento en los ensayos. La clave está en la disciplina. Si dedicas todo a que esto salga bien, no hay pierde. Salgo al escenario convencido de que todo estará perfecto.

En los últimos años ha manifestado su interés por la industria de la moda. De hecho, ha sido imagen de marcas como Boss y Calvin Klein, además de lanzar su propia línea con Gef; ¿de dónde nace este interés particular? 

Para nadie es un secreto que desde muy pequeño siempre me ha encantado la moda, disfruto todo lo que hay en ella y me visto como me siento. Por ejemplo, Don Juan es mucho más estilizado, con trajes y con el púrpura como color característico.

¿Cuál es su diseñador de moda favorito?

Tengo muchos amigos en el mundo de la moda, pero siempre he admirado a Olivier Rousteing, Donatella Versace, Domenico Dolce y Stefano Gabbana. Ahora, Pharrell Williams está haciendo un trabajo muy bueno en Louis Vuitton, así que no me puedo quedar con un solo nombre. 

Tiene tatuada en el pecho la palabra “Medellín” y se ha convertido en un embajador de la ciudad. Cuando un amigo visita la ciudad por primera vez, ¿cuál es el plan infaltable en el itinerario?

Todo lo que hagas en Medellín es perfecto: recorrer sus calles, ir a conocer restaurantes, disfrutar del clima, irse de fiesta… 

Y a usted, en sus ratos libres —si existen—, ¿qué rincones de Medellín le gusta visitar?

Cuando estoy en Medellín, estoy en casa, así que disfruto ir a la finca y estar con mis caballos, pasear en moto. Soy Juan Luis llenándome del amor de mi familia.

Con la película Marry Me exploró la actuación. ¿Le interesaría volver a la pantalla grande o, tal vez, actuar en la televisión?

He tenido varias propuestas, pero ahora estoy concentrado en Don Juan.

Cuando no está de gira y aprovecha para viajar con su familia o amigos, ¿qué destinos son sus favoritos?

Me encanta la playa, pero también un poco de frío, así que no tengo un destino; ahora estoy en modo sol.

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