Terror en El Páramo

Una atmósfera terrorífica que pondrá a prueba la tranquilidad y sacará los miedos de un grupo de soldados hace parte de la historia de El páramo, la cinta del director Jaime Orozco.
 
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POR: 
Carlos Vallejo

No se deje engañar: esta no es otra película de soldados. O sí, pero aquí no los verá sobreviviendo al fuego cruzado, encontrándose millones de dólares encaletados por la guerrilla ni resolviendo el conflicto armado con un partido de fútbol en medio de la selva. A los nueve miembros del comando especial de alta montaña que protagonizan El Páramo les pasará algo muy serio: llegarán a una base militar ubicada en un páramo desolado y brumoso a enfrentarse con un terror inexplicable. Encargado de investigar lo ocurrido con la base –con la que desde hace una semana se perdió la comunicación–, el escuadrón se encontrará con silencios escalofriantes, rastros extraños de sangre, patas de pollo amarradas a techos para espantar demonios y un misterio tras un muro falso: una mujer escuálida, vestida con camuflado, con un gesto permanente de terror y el pelo negro tapándole la mitad de la cara (esa versión de la niña que se salía de un televisor en El Aro que pareciera tener que estar en todas las películas de este género). El aislamiento, la incertidumbre sobre el enemigo, las fallas en los equipos de comunicación, el silencio, los misteriosos hallazgos, un herido y la imposibilidad de huir se sumarán para crear una atmósfera terrorífica que pondrá a prueba los miedos de los soldados.
Dirigida por Jaime Osorio y producida por Rayhuela Films – que ya había presentado García, la cinta de José Luis Rugeles que protagonizaron Margarita Rosa de Francisco y el mexicano Damián Alcázar en 2011–, El Páramo despertó el interés de Hollywood aun sin estrenarse: sus derechos fueron adquiridos por el productor ejecutivo de El amor en los tiempos del cólera para hacer un remake, lo que había ocurrido igualmente con Al final del espectro, filme también de terror que dio a conocer en 2006 a los hermanos Esteban y Juan Felipe Orozco y cuya adaptación protagonizaría Nicole Kidman. El Páramo, además, fue seleccionada por el Fantastic Fest, el mayor encuentro estadounidense especializado en horror, acción, ciencia ficción y fantasía. Según el comité seleccionador: “Dirigiendo por primera vez, Jaime Osorio Márquez es un maestro de la narración. Desde los primeros fotogramas los personajes están en crisis, fragmentos concisos más fragmentos de calentamiento que dejan ver la carga emocional, hasta momentos de maravillosa cámara lenta, logran mantener a la audiencia en constante tensión”.

El director 
Jaime Osorio Márquez no tiene nada que ver con ese otro Jaime Osorio que dirigió en 1991 la sencilla y bien calculada ‘Confesión a Laura’ y que produjo ‘La virgen de los sicarios’ y ‘María llena de eres gracia’. Este Jaime Osorio estudió en la Universidad de Rennes (Francia), ha trabajado como director de comerciales, cambiará radicalmente de género en su próximo proyecto –“estoy reescribiendo una historia de amor”– y actualmente está dirigiendo la secuela de uno de los hitos de la televisión colombiana: La mujer del Presidente.
–¿Por qué el terror?
-–El terror, como género, no sólo busca divertir audiencias sino explorar los temores y angustias de las sociedades. Las buenas películas de terror van mucho más allá de las reacciones emocionales pasajeras y dejan marcas indelebles en los espectadores porque cuestionan el orden establecido. Colombia es un país lleno de traumas y los quise explorar por medio de un género que me permitía llegar al espectador a través de sus emociones para cuestionar sus certezas sobre la realidad política de nuestro país.

www.elparamolapelicula.com

Otros estrenos
‘La mujer que vino del mar’ 
El irlandés Neil Jordan es el responsable de cintas como El juego de las lágrimas, por la que ganó el Oscar a Mejor guion original en 1992. También nos perturbó con Entrevista con el vampiro y El ansia –con vampiros estelares como David Bowie y Catherine Deneuve–, y hace poco ofreció un retrato sin prejuicios de la cotidianidad gay en Desayuno en Plutón, por la que Cillian Murphy fue nominado a un Globo de Oro. Por todo eso, uno nuevo de sus filmes no puede pasar inadvertido. Esta vez se trata de la adaptación de un cuento de la mitología irlandesa en la que Colin Farrell es un atribulado pescador que un día atrapa a una mujer en sus redes.

‘El hijo de Babilonia’
En Iraq, la caída del régimen de Saddam Hussein ha generado historias de gran calidad como Las tortugas pueden volar. En esa línea se inscribe la historia de Ahmed, un niño de 12 años que emprende un viaje en medio de la convulsión que vive su país a unas semanas de la caída del régimen. Acompañado por su abuela, el niño recorrerá un territorio desolado por la guerra para buscar a su padre, que desapareció cuando él nació, durante la Guerra del Golfo. Dirigida por Mohamed Al-Daradji, obtuvo el premio de Amnistía Internacional en el Festival de Berlín en 2010. También fue nominada al Premio del Jurado de Sundance 2010.

Paul’
Afortunadamente, no es la película sobre el pulpo que predecía resultados del Mundial. Esta es una parodia de los filmes de extraterrestres que empieza cuando un alien escapa de sus sesenta años de encierro en una base secreta de la mítica Área 51. Al salir, se cruza con dos geeks –los mismos guionistas, uno de ellos el de la parodia Zombies Party– que se dirigían a un festival de cómic pero que ahora lo ayudarán a encontrar su nave nodriza. Claro que, a diferencia de predecesores suyos como E.T., Mi amigo Mac o el gueto de “langostas” de Sector 9, este alien dejaría de lado el regreso a su planeta por una botella de cerveza.

         

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octubre
23 / 2011