Libro recomendado de la semana: Mientras embalo mi biblioteca
Juan Gustavo Cobo Borda
Mientras embalo mi biblioteca. Una elegía y diez digresiones
Alberto Manguel. Editorial Almadía, México, 2017. 163 páginas.
Alberto Manguel (Buenos Aires, 1948) tuvo un sueño y lo cumplió. Un viejo presbiterio de piedra al sur del valle de Loira en Francia, en un pueblo de no más de diez casas con un granero abandonado, donde pudo instalar su biblioteca que ya tiene treinta y cinco mil volúmenes.
Él y su compañero quien cuidaba feliz el jardín pasaron allí casi quince años, pero luego algún insuceso burocrático que prefiere no revivir los obliga a dejar atrás ese paraíso. Este libro es el elegiaco testimonio de cómo embaló sus libros en cajas para enviarlas a Canadá y además para recordar sus bibliotecas como niño en Israel (su padre era allí embajador de Perón), adolescente en colegios ingleses de Buenos Aires y luego como lector de editoriales francesas en París, inglesas en Londres, de Franco María Ricci en Milán y hasta cinco años en una editorial en Tahití.
Ampliar su mirada y acumular muchos más libros. Incluso en idiomas que no leía como el árabe. De tantos libros saldrán nuevos libros como su Guía de lugares imaginarios sobre las comarcas o países inventados por escritores o su ya clásico Una historia de la lectura.
Por ello en esta ocasión cuenta y reflexiona desde la biblioteca de Alejandría hasta el libro virtual sobre la continuidad y el cambio en ese ejercicio de devoción, gozo y saber que son los libros, de la Odisea al Fausto, de Dante a Lewis Carroll y, claro está, de Robert Louis Stevenson a Verne y Borges a quien le leyó Kipling en inglés en tardes en que trabajaba en una librería de Buenos Aires.
Cuando Manguel, ya empacada su biblioteca en cajas, siente que irremediablemente se ha cerrado un ciclo, el destino le brinda la más jubilosa recompensa: lo nombran director de la Biblioteca Nacional de Buenos Aires. Parece que Borges estaba pendiente para guiarlo a buen puerto.