Cinco novelas para recordar a Ursula K. Le Guin
Revista Diners
Ursula K. Le Guin marcó un hito en la historia de la literatura estadounidense. No solo fue la primera mujer en ganar el título de Gran Maestra de la Asociación de escritores de ciencia ficción y fantasía; también llenó sus novelas de ideas anarquistas, feministas, y taoístas, que en 1966, cuando salió su primer libro, eran consideradas subversivas por la sociedad de su país.
Le Guin se interesó en la literatura fantástica gracias a sus padres, la escritora Theodora Kroeber y el antropólogo Alfred Kroeber, quienes alimentaron su imaginación y la estimularon para que escribiera. A los 11 años completó su primera novela y la envió a la revista de ciencia ficción y cómics más famosa del país: ‘Astounding Science Fiction’.
Aunque la narración no pasó la línea editorial de la revista, Le Guin se dedicó a estudiar sobre las historias fantásticas de California. Pasó su etapa universitaria en la Escuela Radcliffe y la Universidad de Columbia, donde se especializó en la literatura romance de la Edad Media.
En 1953, a los 24 años se casó con Charles Le Guin (profesor de historia), a quien conoció mientras que estudiaba en Francia como parte del programa de la beca Fullbright. Luego de especializarse, y leer cientos de libros, Le Guin publicó su primera historia en 1962 en la revista ‘Amazing Stories’ en la que puso extraterrestres a debatir sobre la organización de la sociedad y la sexualidad.
Estas ideas llevaron a la escritora a convertirse en una estrella respetada en el género de ciencia ficción de los Estados Unidos y el mundo. Su nombre está en la lista de los padres del género junto con Ray Bradbury (1920-2012) escritor de ‘Fahrenheit 451’; Arthur C. Clarke (1917-2008) con ‘2001: Odisea del espacio’; y Philip K. Dick (1928-1982) con su novela ‘¿Sueñan los androides con ovejas eléctricas?’ (que eventualmente serviría de inspiración para la película Blade Runner).
Le Guin publicó seis libros de poesía; veinte novelas; once libros infantiles; una traducción del Tao Te Ching (filosofía china), y un centenar de artículos y poemas para revistas.
En 2014, Le Guin recibió la Medalla por Contribución Distinguida a las Cartas Americanas entregada por los National Book Awards. En su discurso incluyó a todos los escritores de ciencia ficción y agradeció por la mención: “Este reconocimiento es para todos los excluidos de la literatura, que vivieron bajo la sombra de los escritores llamados realistas”.
Por otro lado, la escritora defendió los derechos de las mujeres hasta sus últimos días, su pasión por las creencias maoístas, y varias protestas a los creadores de Avatar y Harry Potter, pues según la escritora están inspiradas en sus novelas El nombre del mundo es bosque y Un mago de Terramar, respectivamente.
A continuación vea las novelas para recordar a Ursula K. Le Guin:
El mundo de Rocannon (1966)
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Le Guin publicó este libro, como su primera novela oficial, en 1966. La historia transcurre en el exoplaneta Fomalhaut II donde Rocannon, miembro de La Liga de los Mundos (la ONU del espacio), sufre un ataque a su nave espacial. Rocannon hace un viaje al sur del planeta, lleno de aventuras, para comunicarse con La Liga y avisarles de un inminente ataque a su plataforma.
Un mago de Terramar (1968)
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Esta puede ser una de las novelas más populares de Le Guin, con la que ganó el Premio Nébula y el Premio Hugo, ambos especializados en literatura de ciencia ficción.
Por otro lado, la novela ha sido comparada con Harry Potter por introducir el concepto de una “escuela de magia”, que luego se popularizó con la llegada de los libros y películas de J. K. Rowling.
La historia está ambientada en el archipiélago ficticio de Terramar, donde está el colegio de Gavilán, un joven mago que debe superar sus debilidades a través del paso del tiempo. La novela estaba pensada para adolescentes, pero con el paso del tiempo se convirtió en un clásico para todas las edades.
El libro cuenta con las secuelas ‘Las tumbas de Atuan’ (1971); ‘La costa más lejana’ (1972); ‘Tehanu’ (1990); y ‘En el otro viento’ (2001).
La mano izquierda de la oscuridad (1969)
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Esta novela combina la ciencia ficción con la emancipación sexual de los años 60. La mano izquierda de la oscuridad cuenta la historia de un embajador terrestre que visita el planeta Invierno para invitarlos a hacer parte de La Liga de los Mundos. Sin embargo, cuando llega encuentra que los habitantes son hermafroditas, y cambian de sexo según las estaciones climáticas. Esta naturaleza lleva al protagonista a discutir con los personajes.
La novela, intransigente y revolucionaria, recibió los premios Nebula (1969) y Hugo (1970).
El nombre del mundo es Bosque (1976)
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Esta novela saltó a la fama a nivel mundial gracias a su parecido con la película Avatar, del director James Cameron. El libro cuenta la historia de Nueva Tahití, un planeta cubierto de bosques y manantiales donde vive una antigua colonización humana mutante. Los humanos (yumana) descubren el planeta y empiezan a explotar madera y otros recursos para enviar a la Tierra. Por otro lado, también esclavizan a una colonia llamada ‘Crichis’, conformada por humanoides de un metro de estatura de color verde. La novela ganó el premio Hugo en 1973.
Poderes (2008)
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La novela cuenta la historia de Gavir y Sallo, dos hermanos secuestrados y esclavizados en la ciudad Etra. Ambos crecen como “hijos” de los Arca, una familia adinerada. La vida de Gavir y Sallo cambia después de una tragedia que los obliga a buscar sus orígenes, en donde encontrarán la explicación a ciertos poderes que mantienen ocultos.
Este libro le dio a la escritora estadounidense el premio Nébula a Mejor Novela Corta en 2008. Hace parte de la trilogía Dones (2004) y Voces (2006), con la que comparte el mismo tiempo y espacio.