Animales del fin del mundo: un playlist
Revista Diners
Hay libros que necesitan una música que los acompañe. ¡Que viva la Música!, por ejemplo. O El guardián entre el centeno. Obras que, por su contenido tan ligado a la cotidianidad de una era, no pueden separarse de la música que marcó una cultura.
Lo mismo sucede con Animales del fin del mundo, la novela de Gloria Susana Esquivel que narra la vida de Inés, una niña de seis años, durante los años ochenta colombianos.
Inés canta de la mano de su amiga María, oye radio en el carro de su padre mientras va de paseo a Melgar (creemos que a Piscilago, un parque acuático especialmente popular durante la época) o sigue los enamoramientos de su madre que canta baladas de amor. A continuación escogimos algunas de las canciones de la época que menciona Esquivel y que, creemos, merecen su propia lista.
1. Déjame llorar, Ricardo Montaner
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2. La soledad, Laura Pausini
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“Siempre con la radio de fondo, escuchando baladas que contaban la historia de una mujer que sobre una alfombra de hierba volaba dormida o de un misterioso muchacho que se llamaba Marco y que se marchaba para no volver”.
3. El Meneíto, El General
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4. Me enamoro de ella, Juan Luis Guerra y 4.40 (Vale aclarar que esta canción no se menciona en el libro, pero por la época y el tono asumimos que los merengues son de 4.40)
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“Rodeada de palmas y matas de plátano, entre meneítos y merengues, la piscina parecía grama luminosa surcada por olas que se mecían a destiempo”.
5. Ronda de las vocales, Canticuentos
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“Sacó una vieja cartilla para aprender a leer y me la entregó. La abrí con cuidado, con temor a que se deshiciera entre mis manos, y él comenzó a enseñarme cuáles eran las vocales”.
6. La Guirnalda, Rocío Dúrcal
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“Me despertó mi madre cantando sobre una mujer que se enamoraba de un extraño en el Puerto de Vallarta”.
8. Lambada, Kaoma
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“Hundí la tecla de reproducción y, con los primeros acortes de un acordeón que le daba la entrada a la compungida voz de una mujeres que cantaba en portugués, puse mi mano sobre su espalda y comencé a mover mis caderas, mientras guiaba los pies de María que intentaban seguirme el ritmo”.
¿Conoce algún otro libro con banda sonora? ¿Descubrió alguna canción en Animales del fin del mundo que no esté en esta lista? Cuéntenos en el espacio de comentarios.