Estopa en Colombia: Nunca es tarde para viajar a lo desconocido

José Manuel Muñoz es en apariencia un tipo muy normal. Nació hace treinta y seis abriles en Cornellá de Llobregat, un pueblo a la orilla de Barcelona, donde compartió junto a su hermano mayor, David, un pasado obrero. José y David ya eran en aquel entonces, además de colegas en una fábrica de carros, aficionados a la guitarra y el canto. Eran un proyecto de lo que serían el resto de su vida, desde un dichoso día de 1999: Estopa.

Puede que se esté preguntando por qué le suena tanto ese nombre, y puede que no encuentre respuesta. Normal, teniendo en cuenta que, aunque se trata de una de las bandas españolas que más discos ha vendido en el siglo XXI (casi 4 millones), el dúo de rumba-rock – como definen los hermanos Muñoz su música, entre catalana y flamenca, guitarrera y folclórica – no se ha presentado con un show en Colombia en sus dieciséis años de historia.

Pero eso se acabó. O se acabará el próximo 22 de octubre, cuando Estopa presente en Bogotá (Royal Center, 9PM) su colección de clásicos del pop español. “La raja de tu falda”, “pastillas de freno”, y otros sencillos con los que alcanzaron lo más alto en las listas ibéricas sonarán junto al último trabajo de los catalanes, su último viaje (y es el décimo de estudio); su Rumba a lo desconocido.

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El single que presentan en Rumba a lo desconocido se titula “pastillas para dormir”. ¿Estopa necesita tomar pastillas para conciliar el sueño?

Después de diez discos y sus correspondientes giras tengo que reconocer que sí. Ahora hemos descubierto la melatonina, una hormona natural que ayuda a descansar. Dormimos en aviones y camionetas, entre concierto y concierto. Durante el mes de octubre daremos nueve en dieciocho días.

¿Qué es desconocido para una banda con tanto recorrido?

Entre otras cosas, Bogotá. Estuvimos allá el año pasado, haciendo un par de showcases y dándonos a conocer entre los medios. Pero no hemos tenido la oportunidad de presentar nuestra música con un concierto completo, y por eso tenemos tantas ganas de que llegue el 22 de octubre. Confío en que la altura no nos haga sufrir demasiado.

Aunque Colombia no les haya visto en directo, sí tienen experiencias en América Latina. México, Argentina, Cuba, Venezuela… ¿Cuánto cambian las cosas cuando cruzan el charco?

Depende de cada lugar. En México, por ejemplo, llenamos salas de cuatro mil personas, mientras que en España tocamos en el Palau Sant Jordi de Barcelona, El Palacio de los Deportes de Madrid y otros recintos con capacidad cercana a las veinte mil. En América somos una banda “underground”, nos han llegado a considerar hipsters, incluso. Aunque siempre hemos detestado las etiquetas.

¿Y qué son más? ¿Rumberos o rockeros?

Somos una banda con un estilo propio, hacemos una mezcla como nos sale y sin intentar ser una cosa o la otra. No somos más que dos hermanos a quienes les divierte hacer música juntos. Y no nos va mal así.

Han producido este disco con la ayuda de Rafa Sardina, quien ha trabajado con toda clase de géneros y artistas: Stevie Wonder, Paco de Lucía, Dr. Dre, Lady Gaga…

Sardina nos ha ayudado mucho a potenciar nuestro sonido, aunque la esencia sigue siendo la misma que en Estopa, nuestro álbum debut de 1999. Es cierto que ahora somos más exigentes con los arreglos y la calidad del sonido, pero no buscamos sonar más sofisticados. A fin de cuentas, crecimos entre Los Chichos, Camarón y las bandas de rock de la época.

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De su disco de debut vendieron más de un millón de copias (físicas). Ahora, es casi impensable llegar a las cien mil. ¿Cómo han vivido la transición al mundo digital?

Para nosotros ha sido difícil aclimatarse a las nuevas plataformas, aunque últimamente estamos viendo como suben las ventas de nuestros discos en internet. En lo que somos unos auténticos novatos es en redes sociales. Hemos creado las cuentas oficiales de Estopa con este disco, y estamos sorprendidos con la cantidad de fans que nos escriben desde todas las esquinas del planeta.

¿Cuánta Estopa nos queda por oír?

Mientras aguante nuestra motivación, seguiremos haciendo música. Viaje a lo desconocido lo compusimos con una ilusión tremenda, pero no puedo decirte si tendremos esa emoción el día que nos sentemos a pensar en otro álbum. Me encanta trabajar con mi hermano (David), y no sólo trabajar, sino compartirlo casi todo en la vida. Así que no sería raro que hubiera Estopa para rato.