Frank Sinatra, el primer ídolo adolescente

Daniel Zamora
Frank Sinatra comenzó a trabajar en la orquesta de Tommy Dorsey y junto a él consiguió su primer éxito musical: ‘I’ll Never Smile Again’.
Hizo parte de la orquesta durante dos años y en 1942 decidió lanzarse como solista. Por ese entonces Benny Goodman era la máxima estrella de la música, y Sinatra, aunque ya era reconocido, se veía eclipsado por la figura del llamado “rey del swing”.
Pero el 30 de septiembre de ese año, cuando Sinatra se subió al escenario del Teatro Paramount de Nueva York, el público se llenó de una euforia tan grande, que se seguiría repitiendo en cada escenario que pisaba. Desde entonces Sinatra se convirtió en el ídolo musical de toda una generación.
El Frank Sinatra que el mundo conoció
De su personalidad se dijo que fue egocéntrico, despiadado y otras tantas cosas. Fue Gay Talese, en su famoso perfil titulado “Frank Sinatra está resfriado”, quien sin duda hizo uno de los retratos que mejor lo describen, en el que destaca su total entrega a la música, la fiesta y las mujeres. También destaca su arrogancia, y cómo familiares y conocidos algunas veces confundían respeto con miedo.
“Frank Sinatra es la estrella de jazz más conocida a nivel mundial. Es un claro ejemplo de sofisticación. Hablar de Frank Sinatra es escuchar en la mente New York, New York o Fly me to the moon. Con su voz inmortalizó estas canciones”, dice Laura Osorio, cantante de jazz, ópera y soprano del Coro Sinfónico Simón Bolívar, de Venezuela.
La versatilidad artística de Sinatra desbordó la música y llegó al cine. Obtuvo el Premio Óscar a mejor actor de reparto en 1953 por la película De aquí a la eternidad, y dos años después volvió a estar nominado por el filme El hombre del brazo de oro.
Una vida de excesos
Pese al indiscutible éxito, tanto en la música como en el cine, su vida estuvo marcada por rumores que lo involucraban con mafiosos como Al Capone- pues el cantante era amigo de Joe Fischetti, familiar del gángster estadounidense-, y Pablo Escobar- el hijo del capo colombiano, Juan Pablo Escobar, dijo que el cantante fue uno de los socios de su padre en Miami-.
Oficiales de la dictadura de Francisco Franco expulsaron a Sinatra de España en 1964, “nunca volveré a ese maldito país” señaló luego de su destierro. Esta frase la retomó el escritor Francisco Reyero, como título de un libro que narra el paso del cantante por el país ibérico.
Las críticas contra Sinatra se concentran en su personalidad, en su vida ambientada por fiestas, whisky y excesos, pero nunca por su música. “La Voz”, como le decían, elude cualquier señalamiento, les hace finta y se conserva como uno de los artistas más importantes de la historia.
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