El reto de Jennifer Aniston

A sus 45 años de edad, Jennifer Aniston es, sin duda, una de las figuras más asediadas de Hollywood, no solo por su belleza, sino por la fama que obtuvo con su papel de Rachel en la serie de televisión Friends. Su divorcio con Brad Pitt, una de las más grandes estrellas de la meca del cine, catapultó, además, el interés de la prensa por ella.

Si bien su carrera se ha mantenido en películas de comedia y sin mayores exigencias actorales, como We’re the Millers, Horrible Bosses, The Break Up y The Bounty Hunter, todas han conseguido recaudos millonarios. Pero Aniston ha decidido darle un giro a su carrera. Con su papel en su más reciente película, titulada Cake, se ha llevado su primera gran nominación como mejor actriz en los Globo de Oro y en los SAG (Screen Actors Gild Awards) en la categoría dramática, lo cual le puede abrir el camino para llevarse una nominación al Óscar.

En Cake, esta rubia interpreta a Claire Simmons, una mujer que padece de dolores físicos y emocionales luego de sufrir un accidente de tránsito. Su frustración y rabia ante el mundo es evidente en cada interacción que tiene con la gente que la rodea, lo cual la ha alejado de su esposo, sus amigos y hasta del grupo de apoyo al que pertenece.

La única persona que le ha tenido paciencia es su empleada doméstica Silvana (interpretada por Adriana Barraza), quien a regañadientes le acolita su gusto por el alcohol y los analgésicos, que consume sin medida.

Sin embargo, tras el suicidio de Nina (Anna Kendrick), una compañera de su grupo de apoyo, se le abre un umbral de preguntas sobre la vida y la muerte, el abandono, los peligros mundanos y el camino a la redención. Y es a través del esposo de Nina (Sam Worthington) y su pequeño hijo, que Claire parece reencontrar el camino de su vida. Diners conversó con esta actriz sobre esta interpretación.

Su papel de Claire es completamente diferente de lo que ha hecho en términos de género. ¿Cómo terminó en este proyecto?

Mi mánager me envió este guion junto a otros que, sinceramente, ya me parecían algo trillados para lo que he hecho. Este, en cambio, me llamó la atención y al ir leyendo, la trama me llegaba como un puño en el estómago. Pensé que tenía que formar parte de esta historia, que haría lo que fuera posible por poder interpretar a Claire. Hablé con los productores y luché para que creyeran que yo podía hacer este papel. Luego me reuní con el director, Daniel Barnz, quien fue increíble y sintió que podía mostrar esa otra faceta como actriz. Le prometí que no lo iba a defraudar y así es como comenzó este idilio.

Usted ha realizado más que todo papeles en comedias. ¿Cómo fue entrar en un rol tan diferente, tanto física como emocionalmente?

Como actriz tengo un abanico de papeles en mi carrera que han variado más que todo en el género de la comedia, aunque también he hecho papeles serios.

Con esta interpretación quería acceder al dolor humano, porque es parte de lo que uno como actor tiene que hacer. El trabajo que realicé para entender la fuente del dolor de Claire y cómo afectaba su físico y su espíritu, fue hablar con mucha gente que está viviendo eso. Igualmente, a lo largo de los años he conocido gente con amargura en su corazón, que los ha enajenado del mundo. Como actriz es un sueño poder interpretar a alguien que sea tan diferente de uno y contar la historia tan honestamente como sea posible.

¿Cómo lidia con el dolor?

En mi vida cotidiana, de la mejor manera posible, con humor. Y esa es una de las cosas bonitas de mi personaje. Cuando estaba leyendo la historia, había partes en las que me hacía reír. Ella tiene un sentido del humor cáustico que le ayuda en ciertos momentos a enfrentar su drama. Al mismo tiempo siento que es tan opuesta a todo lo que yo pudiera haber imaginado o pudiera experimentar en mi vida, que la hace fascinante. Todos hemos sentido dolor de alguna forma, al igual que hemos perdido a un ser querido, y sé que el humor será siempre un instrumento que ilumine momentos oscuros de mi vida.

Para la audiencia ha sido sorprendente verla como nunca se había visto en pantalla…

Créeme, algunos días me he visto peor [risas]. Me siento muy agradecida por esta experiencia de haber actuado en Cake. Si la hubiera interpretado de alguna otra forma, no habría sido honesta con la historia ni con el mensaje de una mujer que se ha sentido enjaulada con su vida durante muchos años. Yo me consideré lista desde un principio para abordarla, quería interpretarla, sin pensarlo dos veces.

A diferencia de su personaje en la película, ¿cómo es su experiencia con la ira?

Hay diferentes maneras de lidiar con la rabia. Cuando algo me saca de casillas, trato de hacer una pausa con lo que esté haciendo. No soy una persona que grita ni alguien que pierde el control con facilidad, al contrario, mantengo la calma casi siempre, porque crecí con gente que pierde la razón muy fácilmente y aprendí qué es lo que no hay que hacer. Hay mejores formas de comunicarse y expresarse cuando uno no está de acuerdo con algo. Y en cuanto a sentir rabia con el mundo tras perder a alguien en la vida, no me lo puedo imaginar y seguramente en ese entorno sí sentiría una rabia inimaginable.

A propósito, ¿qué la saca de casillas?

Tengo una lista muy larga [risas]. Pero al comienzo de esa lista están las mentiras, las historias falsas, los chismes, esas cosas.

En el filme se siente una gran sensación de pérdida. ¿En la vida real ha sentido que ha perdido algo tan grande que no sabe cómo enfrentar esa situación?

Hace un tiempo perdí a alguien muy importante en mi vida y fue una sensación insoportable. Saber que esa persona no va a estar frente a ti o que no vas a poder hablar por teléfono con ella es un sentimiento terrible, y resulta difícil de olvidar por completo.

La película se llama “pastel”, y de dulce no es que tenga mucho…

Es que la vida es como un pastel, puede ser dulce, pero depende del punto de vista con que el que se vea y se viva, y el gusto de la gente. De las situaciones difíciles se pueden sacar enseñanzas que en el camino de la vida pueden convertirse en ingredientes que, al final, hacen que el recorrido sea mucho mejor de lo que se tenía pensado. Todo depende de la actitud que uno le ponga.

¿Cuál es su tipo de pastel favorito?

El pastel de zanahoria es algo que me encanta. No resulta muy común, pero lo recomiendo.

Otra película que se acaba de estrenar es Horrible Bosses 2, que se considera muchísimo más ligera. ¿Cómo es abordar un personaje como la doctora Julia?

Ella es una mujer que sabe lo que quiere y a la vez se trata de un personaje extremadamente divertido de interpretar. No le da pena nada, es una odontóloga adicta al sexo, y eso ya constituye una interesante descripción [risas].

Todos conocemos a alguien parecido, ¿cierto?

Seguro [risas]. Pero en su mente no hay nada malo con eso, y es en esa circunstancia que resulta interesante interpretar personajes tan distintos, porque se trata de poner en situaciones diferentes a la diversidad de personalidades que existen en el mundo.

¿Tiene algún plan de dirigir alguna película en el futuro?

Existen momentos en que me pongo a pensar en eso y he tenido oportunidades que han llegado, pero mis representantes no me dan el tiempo que necesito para considerarlo [risas].

Cada vez que la vemos se nota más radiante. ¿Cuál es su régimen de belleza?

Es muy halagador oírlo, gracias. ¿Seguro que no necesitas gafas? [risas]. En serio, lo que yo hago consiste en tomar mucha agua, dormir las horas necesarias, aunque eso no lo he podido hacer mucho últimamente, pero resulta vital, tener una rutina de ejercicio mínima cada día, no tiene que ser por horas, solo algunos minutos, comer muchas verduras y muy pocas cosas con azúcar. Creo que le debo mucho a la herencia griega por parte de mi padre, John Aniston.

¿Algún placer culpable?

Bueno, yo podría vivir eternamente a punta de una dieta mediterránea, olivas y queso feta. ¡Al final de cuentas no es que sea tan malo!

De películas que ha visto de esta temporada, ¿cuál le ha llamado la atención?

La última que vi fue Into the Woods. La interpretación de Emily Blunt me pareció fantástica, y ni qué decir de Meryl Streep, todo el elenco es muy bueno.